El 'nuevo' permiso ayuda a evitar 1.250 muertes en carretera en tres años

El carné por puntos ha superado ya su periodo de rodaje. Con derrapes puntuales, pero llega a su tercer aniversario con un balance invisible y otro que toca muy directamente a casi dos millones de españoles. Ambos, estrechamente unidos. El primero es el de las vidas que no se han perdido en las carreteras, unas 1.250. En 2005 se cerró el año con 3.332 fallecidos en accidente de tráfico; en 2008, con 2.181. Y este año, aunque ya se han producido 1.000 muertos en accidente de circulación, el descenso anual alcanza casi el 10%. El segundo balance, el que se puede medir científicamente, es el de la pérdida de puntos, que han sufrido casi dos millones de conductores. De ellos, 289.048 han recibido dos o más sanciones con resta de puntos. El director de Tráfico, Pere Navarro, recordaba hace sólo unos días que "éste es el peaje que hay que pagar" para evitar la sangría de la carretera, que en los últimos 10 años se ha cobrado más de 50.000 vidas.

Aún así, el 80% de los conductores españoles sólo lo notará este aniversario porque desde ayer a las ocho de la tarde tienen dos puntos extra (14 en total) en el saldo de su carné, al no tener ninguna sanción firme por infracciones graves o muy graves.

Cuando se puso en marcha el nuevo permiso, el 1 de julio de 2006, el Gobierno aseguró que su objetivo era echar de la carretera a los infractores que ponían en peligro la seguridad vial. Desde entonces, 50.000 conductores han perdido el carné al quedarse sin puntos, más de la mitad ya ha entregado su permiso de conducir, y otros 24.000 tendrán que entregarlo en los próximos meses. Después deberán cumplir seis meses de suspensión del derecho a ponerse al volante, asistir a los cursos de reeducación y volver a examinarse. Desde que éstos se pusieron en marcha, 41.392 personas han vuelto a la autoescuela. El cruce de datos constata una inquietante realidad: 25.000 conductores han perdido ya el permiso, pero sólo 6.214 han asistido a los cursos de reciclaje para recuperarlo. Miles de conductores pueden estar circulando sin autorización, por lo que se arriesgan a ser condenados por un juez.

El subdirector de Normativa de la Dirección General de Tráfico, Ramón Ledesma, explica que mientras las denuncias por velocidad y alcohol siguen bajando, "la gran asignatura pendiente sigue siendo el móvil". "No somos capaces de soltar el teléfono al volante". Sin embargo, es la velocidad la infracción que más ha adelgazado el saldo de puntos de los españoles (41% del total). Las estadísticas de este aniversario también destapan conductas que parecían casi desterradas: no usar el cinturón de seguridad o el casco, que es la segunda causa de pérdida de puntos (14%). Le sigue el consumo de alcohol (9%) y el uso del móvil (8%).

Y si el saldo de puntos se considera como un termómetro de buena conducción: las mujeres ganan por goleada. El 81% de los sancionados y castigados con retirada de puntos son hombres, el 19% mujeres. Además, la reincidencia casi no existe en el caso de las conductoras. Por edades, los automovilistas de entre 25 y 34 años son los que acumulan más infracciones.