Camps impulsa un nuevo órgano de coordinación autonómica

La Comunidad Valenciana, Andalucía, Cataluña, Castilla y León, Aragón, y Baleares decidieron ayer en Valencia convocar una conferencia de presidentes autonómicos al margen de la anunciada por José Luis Rodríguez Zapatero. La conferencia está inicialmente prevista para el próximo invierno y a ella se convocará a los 17 presidentes autonómicos y a las ciudades de Ceuta y Melilla. La propuesta parte con el aval de importantes gobiernos autonómicos del PP (Comunidad Valenciana y Castilla y León) y del PSOE (que gobierna en solitario en Andalucía y, en coalición, en Cataluña, Aragón y Baleares).

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, dejó clara su apuesta por este nuevo órgano de coordinación autonómica al recibir a los consejeros, tras el encuentro, en el Palau de la Generalitat.

Gobiernos del PP y del PSOE se unen frente a los 'excesos' del Ejecutivo central

"Se trata de transitar caminos constitucionales distintos de los que se han transitado hasta ahora", argumentó el consejero de Presidencia balear, Albert Moragues, del PSOE. "No puede ser que el Gobierno haga decretos sobre competencias autonómicas sin consultar a las comunidades". "Si el Senado fuese realmente una Cámara territorial, estas reuniones no tendrían sentido", sentenció.

Las seis autonomías citadas, que ya disponen de Estatutos de segunda generación, iniciaron sus encuentros el año pasado en Zaragoza, coincidiendo con los 30 años de entrada en vigor de la Constitución. Ayer, en su cuarta reunión celebrada en Valencia, decidieron dotarse de nuevos "instrumentos de cooperación horizontal". Así, acordaron crear una conferencia de presidentes autonómicos sin presencia del Estado y crear una "secretaría permanente" para avanzar en la coordinación de sus políticas.

El consejero de Gobernación valenciano, Serafín Castellano, del PP, explicó que la conferencia de presidentes autonómicos será "complementaria" de la que organiza el presidente del Gobierno. Los detalles de la misma se ultimarán el 15 de noviembre en una nueva reunión en Barcelona.

El consejero de Interior catalán, Joan Saura, de ICV, argumentó que las autonomías creen que es necesario que el Gobierno tenga en cuenta la opinión de las comunidades al fijar su posición en la Unión Europea; consideran conveniente realizar "una declaración conjunta frente a la continuada invasión competencial del Estado" e intensificar la cooperación entre ellas.

Castellano explicó, como ejemplo, la necesidad de que el Ministerio de Industria tenga en cuenta la opinión de las autonomías mediterráneas a la hora de trasponer a España la directiva europea que regula la utilización de la pólvora y los fuegos artificiales.

"Éste es un instrumento más del Estado de las autonomías", remachó el consejero de Presidencia andaluz, el socialista Antonio Ávila.

Una opinión que refrendó el vicepresidente aragonés José Ángel Biel, del PAR, y el consejero de Presidencia de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, del PP.

En la reunión las seis autonomías también acordaron homologar el carné de manipulador de alimentos, los criterios para instalaciones con riesgo de legionelosis y las normas sobre tatuajes y piercings.