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Reportaje:

Otro campo de fútbol con polémica

Un agricultor dice que el consistorio de Valencia invade su terreno y éste lo niega

Sara Velert

"Este terreno, a partir del olivo, es de mi madre". Jaime Valls, de 50 años y agricultor de profesión, muestra una cuña de terreno antaño de huerta que entra de lleno en el futuro campo de fútbol municipal del barrio valenciano de Beniferri. Las máquinas comenzaron a remover la tierra a mediados de abril, y desde entonces Valls intenta sin éxito que el Ayuntamiento de Valencia reconozca que "ha invadido" un suelo que no le pertenece. "Tengo los papeles del Registro, no hay ninguna duda", asegura Valls. El Ayuntamiento niega tajante haber ocupado terreno ajeno.

El nuevo campo de Beniferri se construye junto a un centro de mayores con dinero del fondo estatal de apoyo a los ayuntamientos, el Plan E. Las instalaciones se adjudicaron por 1,8 millones de euros y se levantan sobre una parcela pegada a la rotonda y avenida del Maestro Rodrigo. A la familia de Valls se le expropió una parte de huerta para la avenida, pero junto a la vía quedó un trozo de campo sin cultivar de unos 600 metros cuadrados que el denunciante afirma que sigue en manos de su madre.

El gobierno local del PP, por el contrario, asegura que en el Registro de la Propiedad solo queda por eliminar la referencia a una servidumbre de paso que ya "está extinguida", por lo que la reclamación no ha lugar. Pero el agricultor niega haber vendido el camino o que el campo fuera objeto de la expropiación de Maestro Rodrigo. El consistorio valenciano insiste en que la ocupación de la parcela está en regla.

La parcela para el campo de fútbol municipal de Beniferri procede de otra polémica relacionada con el balompié, la que rodea la permuta de terrenos del Ayuntamiento con el Valencia CF para construir el nuevo estadio del club. El terreno de Beniferri forma parte de esa permuta, según confirma el Ayuntamiento de Valencia. El acuerdo entre ambas partes valoró el suelo de la avenida de las Cortes Valencianas, donde el Valencia CF construye el estadio, en 45 millones de euros que debían pagarse al consistorio en parcelas y en efectivo. La operación, sin embargo, sigue pendiente de cerrarse por la crisis económica del club -y la analiza la Fiscalía por una denuncia del Cercle Obert de Benicalap-. Aún así, el Ayuntamiento trabaja ya en el terreno de Beniferri. La ocupación "está autorizada" y no es necesario esperar a que se liquide la permuta y se escrituren las parcelas, sostienen fuentes municipales. El Valencia CF también empezó las obras del nuevo estadio con la permuta pendiente.

A Jaime Valls la operación le ha pasado por encima, insiste, y al final ha decidido consultar el asunto con un abogado.

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Sobre la firma

Sara Velert
Redactora de Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1993, donde ha pasado también por la sección de Última Hora y ha cubierto en Valencia la información municipal, de medio ambiente y tribunales. Es licenciada en Geografía e Historia y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, de cuya escuela ha sido profesora de redacción.

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