El sector histórico de la Universitat busca candidato a rector

Alguien dijo: viejos rockeros. Otro: vieja guardia. Y, aunque ayer no lo hizo, alguno de los presentes suele hablar de sí mismo y del resto como "las falleras mayores". Bajo esas tres formas de quitarse importancia se encuentra, quizá, el grupo más influyente de profesores de la Universitat de València. La mayoría de ellos vinculados a lo que se llamó el Bloc. Con una importante proporción de catedráticos, incluyendo a los dos últimos rectores (sin contar al actual) de la universidad. Un grupo de PDI (Personal Docente Investigador) interesado por la gestión universitaria, preocupado por el rumbo de la institución y que ayer, en una asamblea de los tres campus celebrada en el auditorio Joan Fuster de Geografía e Historia, dio el segundo paso para promover de forma participativa un programa de gobierno y un candidato a rector que se comprometa a seguirlo una vez que Francisco Tomás deje el cargo, no se sabe si en febrero o marzo de 2010.

El rector niega tener un 'dossier' policial sobre profesores anti-Bolonia

La fecha puede parecer lejana, pero ayer se aseguró que no lo está: la presentación de candidaturas se cierra 40 días antes de las votaciones, lo que puede situar el límite en enero. Por otra parte, dentro de nada llegan las vacaciones de verano. La búsqueda de candidatos se limita por tanto al primer trimestre del curso. Un plazo ajustado en términos universitarios, más teniendo en cuenta lo parado que ha estado todo hasta que la tradición asamblearia de la Universitat echó a andar hace unas semanas.

La convocatoria de ayer coincidió con el consejo de gobierno de la universidad, lo que dificultó la asistencia, que alcanzó las 75 personas. Intervinieron menos, pero se trataron muchos temas: la importancia de mantener la elección del rector fuera de la influencia de los partidos. De mantener la independencia frente a las empresas. De plantear el relevo de muchos profesores que superan los 60 años. De no permitir que la docencia en valenciano caiga a causa de la reforma de Bolonia. De introducir las políticas de igualdad en la declaración que salió de la asamblea anterior.

Se discutió si debería devolverse al Claustro la elección del rector. Si el término excelencia debía quitarse o no de la declaración mencionada. Si debía equipararse la interrupción anti-Bolonia de consejos de gobierno con la decisión del rector de llamar a la policía para desalojarlos. Un profesor, Salvador Feliu, acusó al rector de emplear prácticas "franquistas" y de tener un dossier policial que lo implica junto a otra docente en la revuelta estudiantil. Más tarde, el rector negó tener ningún dossier. Y Josep Guia propuso en voz alta tres primeros nombres para la candidatura: Juan Segura, Paco Montes (quien acto seguido se autodescartó) y Antoni Furió.