Los émulos de Ferrari
Un monoplaza diseñado por estudiantes de la UPV volverá a competir en Silverstone - La Diputación apoya su presencia con 80.000 euros
Un motor de 600 centímetros cúbicos y una velocidad máxima de 120 kilómetros por hora. Quizá no sea el monoplaza que a Fernando Alonso le gustaría conducir, pero tiene bastantes papeletas para hacer un buen papel el próximo mes de julio en el circuito de Silverstone (Reino Unido). Este bólido correrá en la competición Formula Student y la escudería que lo ha diseñado y construido, FS Bizkaia, la integran más de 40 estudiantes de ingeniería de la Universidad del País Vasco (UPV). Ayer presentaron en la Escuela de Ingenieros de Bilbao el fruto de más de once meses de trabajo.
La UPV participa por segundo año consecutivo en esta prueba, en la que 85 universidades de una veintena de países -la mayoría europeos, pero también están Canadá, India e Irán- compiten para demostrar que sus estudiantes son capaces de construir un monoplaza y correr con él. El vehículo ha sido desarrollado en colaboración con dos centros de formación profesional -el Erreka Mari de Bilbao y el Saturnino Peña de Sestao- y ha sido apadrinado por la Diputación de Vizcaya, que ha destinado 80.000 euros a repartir entre el proyecto de este año y el del próximo. Es una cantidad significativa, ya que los estudiantes estiman en 60.000 euros lo que llevan gastado hasta ahora. "Esto no es un juguete. Estos estudiantes son el futuro de la industria de la automoción. Una industria que supone el 17% del PIB de Vizcaya", señaló el diputado general, José Luis Bilbao, durante la presentación.
El coche correrá contra los que han diseñado otras 85 universidades
Muchos alumnos presentan como proyecto de fin de carrera su trabajo en el vehículo
El año pasado, con menos apoyo, menos tiempo y "una décima parte del presupuesto de otras universidades", los estudiantes de Ingenieros quedaron en el puesto 65 (entre 95), según recordó Johnatan Amenedo, alumno del centro y manager del equipo. Alemanes y holandeses coparon las primeras posiciones.
Veinte alumnos viajarán al circuito británico. "Aún no sabemos quién conducirá. Haremos una prueba allí y veremos quién tiene más destreza", adelantaba Guillermo Cadiñanos, encargado del diseño del chasis. Este casi licenciado en Ingeniería Industrial explicaba que lo de menos en esta competición es la velocidad. "Cuentan más la aceleración y la respuesta en las curvas". Pero antes de dar vueltas al circuito, los vehículos tienen que someterse a unos tests de consumo, aceleración, estabilidad y frenado a los que el anterior prototipo no sobrevivió.
Vanessa Lorenzo es la única mujer entre los que viajarán a Silverston. "A ver si va cambiando la idea de que Ingeniería Industrial es una carrera de hombres", reclamaba. Muchos estudiantes han elegido presentar como su proyecto de fin de carrera su participación en el diseño del vehículo, pero no es el caso de Lorenzo, que ha tenido que robarle horas al sueño para compatibilizar su participación en FS Bizkaia y su proyecto sobre imagen tridimensional por ordenador.
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