Dos jueces no asociados aspiran al decanato de Barcelona para sustituir a Regadera

Dos jueces no asociados competirán por el cargo de juez decano de Barcelona en las elecciones que se celebran mañana y en las que están llamados a votar casi 200 magistrados de juzgados de la ciudad. Es el único cargo de la judicatura por elección directa y por primera vez desde que se celebran elecciones no se presenta ningún candidato de la mayoritaria y conservadora Asociación Profesional de la Magistratura (APM) ni de la progresista Jueces para la Democracia (JpD).

Los representantes de ambas asociaciones admiten que no han encontrado a un aspirante con posibilidades. "No presentamos ningún candidato porque eso sería dividir mucho el voto y provocaría un resultado incierto", explicó el portavoz de JpD, Miguel Ángel Gimeno. Hace ahora poco más de un año JpD presentó como candidata a Raquel Alastruey, que sólo obtuvo 17 votos en la segunda vuelta, pero que dividió el voto progresista, lo que favoreció la elección de José Manuel Regadera por 56 votos, frente a los 55 que obtuvo la aspirante a la reelección, Maria Sanahuja, también afiliada a JpD, pero que no contaba con el apoyo de la asociación.

Las elecciones de mañana se celebran después de la dimisión de Regadera, que el próximo 21 de septiembre será juzgado por un delito de violencia doméstica por el que el fiscal le pide nueve meses y un día de cárcel. Su segunda esposa, de la que está en proceso de separación, también se sentará en el banquillo y afronta una petición fiscal de siete meses de cárcel.

Los dos candidatos a sustituirle son Xavier Paulí y Maria Josep Feliu. El primero tiene 43 años, lleva 19 en la carrera judicial, es titular del Juzgado de lo Penal 22 de Barcelona y tuvo un papel muy activo a favor de la huelga de jueces del pasado 18 de febrero. Asegura que aunque no pertenece a ninguna asociación, "promueve el entendimiento ente todos sin distinción". Feliu es titular del Juzgado de Instrucción 7, tiene 25 años de experiencia y ha remitido una carta a sus compañeros en la que se propone que los juzgados de Barcelona "sean un ejemplo de buen funcionamiento, prestando un buen servicio a los ciudadanos".