"Feijóo no puede ser austero con los servicios públicos"

Su segundo mandato al frente de UGT en Galicia tendrá poco que ver con el primero. José Antonio Gómez (Ourense, 1965), elegido el pasado sábado como nuevo secretario de UGT con el 94% de los votos, teme que la Xunta dirigida por Alberto Núñez Feijóo aplique la austeridad al gasto en servicios públicos esenciales, como la sanidad.

Pregunta. Le esperan cuatro años muy complicados.

Respuesta. Este es el momento de las organizaciones sindicales. Por desgracia, la crisis va a poner en valor nuestro trabajo diario.

P. ¿Cuántos afiliados tienen?

R. En UGT hemos alcanzado la cifra de 69.504 afiliados cotizantes (que pagan sus cuotas) en Galicia y tenemos cerca de 7.000 delegados. Desde 1986 somos la primera fuerza sindical.

"No podemos competir con salarios más bajos, sino con I+D"

Si hay algún brote verde tenemos que cuidarlo entre todos"

P. En la marcha del 1 de mayo no se notó. La participación fue muy floja.

R. Me hubiera gustado que se movilizara más gente. Aunque lo verdaderamente importante es que nuestro sindicato esté allí donde se produzcan los conflictos. Tenemos que estar al lado de los trabajadores, ser cercanos. Desgraciadamente nos toca aparecer cuando hay sucesos, pero hay otra parte sindical de trabajo diario que los medios de comunicación no recogen y que está en el día a día de la labor sindical.

P. ¿Qué va a hacer los próximos cuatro años?

R. El modelo de la economía especulativa se ha demostrado un fracaso. Es el momento de darle la vuelta al sistema y poner en el centro el trabajo, que es lo que verdaderamente genera riqueza. No queremos que la igualdad quede postergada por la crisis. Me refiero a la igualdad entre hombres y mujeres y también entre trabajadores inmigrantes y nacionales. No queremos segmentaciones. En segundo lugar, tenemos que ser conscientes y transmitir que no podemos competir con salarios más bajos. Tenemos que hacerlo con investigación y desarrollo, reforzando la política industrial y reorientando las actividades para que sean más productivas. Hay que acelerar las infraestructuras públicas y mantener el compromiso con el sector primario.

P. Precisamente, la Xunta está considerando dar entrada al capital privado en la construcción del nuevo Hospital de Vigo.

R. Nosotros apostamos por la sanidad pública y creemos que no es un debate caduco. Lo de más mercado, menos Estado ha fracasado. El Estado ha ido subcontratando actividades, perdiendo peso. Desde UGT reclamamos la vuelta al sector público.

P. ¿Cree que en Galicia podrían darse manifestaciones xenófobas como en Reino Unido?

R. No, no lo creo.

P. ¿Cómo ve al nuevo gobierno de la Xunta?

R. Los mensajes de austeridad que está lanzando el señor Feijóo pueden estar bien o mal. Mal, por ejemplo, cuando se aplica a los servicios públicos básicos. Eso me preocupa. A corto plazo creemos que hay que desarrollar las medidas incluidas en el Pacto por la Competitividad [firmado con el anterior gobierno bipartito]. Las comunidades autónomas tienen competencias muy importantes para ayudar a salir de esta situación. Por ejemplo, estableciendo un salario de inserción para aquellas personas que hayan dejado de cobrar prestaciones por desempleo.

P. El paro se ha reducido en más de 800 personas según el último dato del INEM, ¿es el principio de la recuperación?

R. No soy adivino, pero creo que es pronto para hablar de un cambio de tendencia. Si hay brotes verdes tenemos que cuidarlos entre todos.

P. El anterior equipo de gobierno de la Xunta, con el acuerdo sindical, se gastó siete millones de euros en cursos de formación durante el mes de diciembre para que las empresas del automóvil no presentasen ERE. ¿No cree que fue muy electoralista?

R. Fue una buena medida. De hecho, en otros países se están aplicando fórmulas parecidas para evitar la destrucción de empleo.

P. El sector del Metal en la provincia de Pontevedra irá mañana a la huelga en reclamación de un convenio que contemple una subida salarial del 6%. En plena crisis, ¿no es una exigencia demasiado ambiciosa?

R. La patronal ofrece el 0,5%. ¿No cree que se le pide demasiado a los trabajadores? Determinados empresarios están enrocados en su postura.