El Ibex 35 se acerca a los máximos anuales

Las expectativas de recuperación de la economía global están ganando muchos puntos y los inversores las trasladan al precio de las acciones con tanta facilidad como entusiasmo.

El Ibex 35 ganaba ayer el 2,19% para cerrar en 9.630,90 puntos, ya muy cerca de los 9.724,00 puntos del máximo de cierre de este año y un poco más lejos del máximo intradía de 9.800,00 puntos, ambos conseguidos el pasado día 6 de enero.

El hecho de que este tirón haya coincidido con la mayor suspensión de pagos de la historia de Estados Unidos tan sólo es una contradicción más en la actual coyuntura bursátil, en la que en menos de tres meses el Ibex 35 ha recuperado el 43,68% en medio de una abundante lluvia de datos económicos negativos y de pronósticos muy poco favorables.

En el mercado de valores español abundaron las subidas de más del 5% aunque, entre los grandes valores, destacaba el avance del Banco Santander, del 4,14%. Los otros bancos y Telefónica encontraron más problemas para sumarse al ritmo de la sesión, lo que hizo que esta Bolsa quedara bastante rezagada respecto del resto de las plazas europeas. La Bolsa de Francfort subió el 4,08% y la de París el 3,11%.

La atención de los inversores continúa cautivada por la evolución de la coyuntura en Estados Unidos, donde el gasto en construcción repuntó inesperadamente en abril, al tiempo que crecen los ingresos personales. La actitud de los consumidores, sin embargo, continúa siendo de prudencia, pues el gasto descendió en abril el 0,1% y el ahorro creció el 5,7%. En términos absolutos, la cifra de ahorro es la más alta en 50 años.

Aunque para la economía estadounidense este estancamiento del consumo no es una buena noticia, el resto de los indicadores invitaba al optimismo, sobre todo el dato de actividad manufacturera del mes de mayo, que creció 2,7 puntos para situarse en 42,8, todavía lejos de la barrera de los 50 puntos que separan el crecimiento de la contracción de la actividad. El Dow Jones reaccionó con un repunte del 2,6%

Las expectativas de recuperación también están afectando al mercado del petróleo, en el que el precio del barril se acercaba a los 68 dólares en Nueva York y superaba ya los 67 en Londres atendiendo a un posible incremento de la demanda.