"Esto es sólo el principio"

La evolución que ha sufrido el Ferrari F60 en las últimas dos carreras ha sido impresionante. En el arranque del campeonato, el coche no sólo era lento, sino que, además, arrastraba problemas de fiabilidad. La Scuderia acumuló dos roscos en las dos primeras pruebas, saltaron todas las alarmas y la presión de Maranello tuvo como primera consecuencia la defenestración de Luca Baldisserri, el director deportivo del equipo, desterrado a la fábrica. Tres grandes premios después de aquello, el paquete de mejoras que Ferrari incorporó en Montmeló ha provocado que Kimi Raikkonen (tercero ayer) y Felipe Massa (cuarto) comiencen a asomar la cabeza por el podio. Stefano Domenicali, el jefe de la escudería, pidió entrega y el compromiso que obtuvo salta a la vista. La filosofía italiana que impera en Ferrari ha acelerado ese proceso.

"Briatore es demasiado optimista. No somos rápidos", reconoce Alonso

"Esto es sólo el principio", aseguró Domenicali tras la carrera; "y demuestra que trabajamos en la dirección correcta. No hay duda de que Brawn aún es el mejor coche, pero ya no está tan lejos y vamos para arriba".

El esfuerzo que ha hecho Ferrari contrasta con el estancamiento de BMW. En Mónaco, Nick Heidfeld terminó el undécimo, y Robert Kubica abandonó por problemas en los frenos de su coche. "En ningún momento del fin de semana fuimos competitivos. Tenemos que darnos prisa y acelerar el desarrollo del coche", dijo Mario Theissen, director del equipo alemán. Sin embargo, los hay que no piensan que eso vaya a ser posible debido a la filosofía alemana que impera en BMW. "Ahora ves a Ferrari y te das cuenta de que han trabajado como animales para sacar esto para adelante, pero nosotros estamos ceñidos a un orden de trabajo establecido en la fábrica que no se altera. Es una cuestión de filosofía", explica un miembro del equipo. "La prueba es que aún no hemos introducido el doble difusor".

Y luego está el caso de Renault. Mientras Flavio Biatore vende humo y asegura que el R29 ya circula en los mismos tiempos que Ferrari, Fernando Alonso, el que va dentro del coche, no lo ve tan claro. "Briatore es demasiado optimista. Perdimos cualquier opción cuando llegamos aquí y vimos que no éramos rápidos", dijo el español, que cruzó la meta séptimo, tras ganar dos posiciones gracias a los abandonos de Vettel y Kovalainen. Se suceden las carreras y es difícil de decir si esa mejora significativa que espera Alonso llegará algún día. "Tendremos un nuevo alerón delantero en Turquía, pero eso no garantiza nada. Los demás también mejorarán", cerró el asturiano.