Condenados ocho integrantes de los Latin King por matar a un 'ñeta'

Ocho integrantes de la banda juvenil violenta Latin King fueron condenados ayer por la sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid a 17 años de cárcel por asesinar en 2005 a Jimmy Junior Ureña del Villar, de 18 años y miembro del grupo rival de los Ñetas. Los magistrados ordenan la disolución de la organización en Madrid y que los inculpados indemnicen con 115.000 euros a la madre del fallecido. Las partes ya han anunciado que recurrirán el fallo.

La sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado Rafael Mozo Muelas, también condena a cinco imputados por asociación ilícita a penas de un año y siete meses. El resto no ha sido sentenciado por este hecho porque ya fueron culpados en una sentencia de este delito por la propia Audiencia Provincial. Otros tres acusados en el juicio han quedado absueltos ya que no se ha podido acreditar que participaran en los hechos.

Los jueces aprecian que hubo alevosía en el ataque a Jimmy Ureña

Mientras golpeaban a la víctima, otros gritaban "mátale, mátale"

Los jueces consideran probado que unos 50 integrantes de los Latin King quedaron a las nueve de la noche del 4 de noviembre de 2005 en la plaza de Bami (en Ciudad Lineal) para responder a una agresión sufrida por uno de los integrantes de la banda. Mandaron en primer lugar a unos menores para inspeccionar el lugar donde se reunían los rivales de los Ñetas, la plaza de la Reverencia. Cuando supieron cuántos y dónde estaban, "decidieron, planificaron y organizaron la entrada en la plaza de la Reverencia", según la sentencia. Para ello, dibujaron un plano en la arena del parque y formaron grupos de 10 personas que entraron por cada una de las calles que dan acceso a la plaza donde estaban los Ñetas. Al frente de cada uno de ellos iba un rey (un mando) que recibió un cuchillo que previamente había sido escondido en el parque. El resto se armó con palos y objetos procedentes de un contenedor cercano.

Después, entraron en la plaza de la Reverencia por las cuatro calles que dan acceso a la misma para evitar que huyeran sus oponentes. Irrumpieron con gritos de "maten a esos hijos de puta", en referencia a los Ñetas, a los que arrojaron botellas y otros objetos. Los rivales, sin embargo, lograron huir.

Un grupo de Latin King, formado por unas 15 personas, salió detrás de Jimmy Junior Ureña, al que dieron alcance cerca de la calle de los Misterios, al lado de Arturo Soria. Allí le dieron patadas y golpes por todo el cuerpo con los instrumentos y palos que llevaban, hasta que lo derribaron. Después, con dos cuchillos diferentes, le asestaron 18 puñaladas, mientras algunos integrantes gritaban "mátale, mátale". Murió prácticamente en el acto desangrado y por los golpes recibidos en la cabeza, según los forenses del caso.

El tribunal ha aplicado la agravante de alevosía, ya que los autores se aseguraron de que la víctima no podía defenderse y la atacaron de manera "súbita, inesperada y sorpresiva". "El agredido se vio acorralado y agredido a golpes y cuchilladas. Nos encontramos ante un plan previamente trazado. Es preciso también destacar que los autores después de agredir a la víctima la dejaron abandonada en el suelo, huyendo del lugar, sin pedir ayuda o auxilio", afirma el fallo.

Los magistrados no apreciaron que hubiera ensañamiento. En su opinión, los atacantes no ejecutaron la agresión de forma que aumentara deliberadamente el sufrimiento del fallecido.

La sección 23 entiende que los Latin King es una organización jerárquica cuyo fin es el de delinquir y provocar la violencia. Para ascender es necesario pasar varias fases, que incluyen actos violentos contra terceros. Los jueces han ordenado la disolución del capítulo (sección) de los Latin King en Madrid.