_
_
_
_
Reportaje:

Rossi se pica

Escocido por la victoria en Japón de Lorenzo, su compañero en Yamaha, el italiano circula como un disparo en Jerez

Oriol Puigdemont

El domingo pasado, al terminar la carrera de MotoGP en Motegi (Japón), Jorge Lorenzo aparcó su Yamaha en el corralito y, de un brinco, se echó encima de sus mecánicos, que lo abrazaron desde el otro lado de una valla. Acababa de adjudicarse su segunda carrera en la categoría de las motos pesadas y, de paso, se colocaba al frente del Mundial. En el salto, una de sus piernas rozó a Valentino Rossi (fue segundo), que departía con su equipo. Rossi se giró y observó a su compañero con una mirada desafiante.

No hay nada que cabree más al italiano que una victoria de su compañero de equipo. Aunque a la fuerza, Il Dottore digiere los triunfos de Casey Stoner (Ducati). Al mismo tiempo, Dani Pedrosa (Honda) no le perturba demasiado, debido a los problemas de adaptación a los neumáticos Bridgestone de su moto. Rossi cree que su principal enemigo está justo al otro lado de su taller.

Il Dottore cree que su principal enemigo está justo al otro lado de su taller

La gente que rodea al italiano ha identificado una especie de código de conducta que les permite saber qué consideración tiene de sus rivales. "Hay que fijarse en cómo les trata", asegura una fuente muy próxima al motorista de Tavullia; "si Vale lanza piropos hacia otro piloto es que a ese tío no le da importancia. Al contrario, cuando ataca o reta a alguien, eso significa que le preocupa. Y con Lorenzo está preocupado", conviene esta persona. En este sentido, cobra importancia lo que dijo Rossi el jueves, cuando aseguró que, de encontrarse en una situación parecida a la del Gran Premio de España de 2005 -echó de la pista a Sete Gibernau en la última curva- con Lorenzo, volvería a repetir la maniobra.

El italiano aún arde de rabia por el triunfo de su vecino. Nada más salir ayer a pista en Jerez, Rossi circuló como un disparo. "Hemos podido hacer una nueva puesta a punto de la moto que ha ido perfecta. Estudiamos las dos primeras carreras y encontramos soluciones a los problemas de adherencia del neumático trasero", explicó Rossi.

Al contrario que en Japón, Lorenzo fue el que lo pasó mal esta vez. "Estoy un poco enfadado porque nos hemos inventado una puesta a punto que no ha servido. Al abrir el acelerador, el motor hace cosas raras, y por eso tenemos que trabajar mucho en la electrónica", apuntó. "Valentino ha ido muy rápido desde el primer momento, y eso significa que lo tiene claro", aseguró Pedrosa, que volvió a pedir "una reacción" de Honda: "No hay ningún plan diseñado para que lleguen piezas nuevas".

Jerez, que este año abrirá el centro urbano de forma controlada a los motoristas, se prepara para otro Gran Premio.

Rossi, ayer en el circuito de Jerez.
Rossi, ayer en el circuito de Jerez.AFP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_