Más allá de Pau Gasol
Cada vez más y cada vez más jóvenes. La NBA se lleva a los mejores jugadores europeos, entre los que se encuentra un ya numeroso grupo español, con la naturalidad de quien no concibe que puedan ponerse puertas al campo. Y así es. Y así lo entienden los clubes de allá, los de aquí y, por supuesto, los propios jugadores.
La obligación de los clubes, de los jugadores y de sus agentes es afrontar este proceso irreversible con buena disposición y habilidad para que todos salgan ganando. El DKV Joventut, con su presidente, Jordi Villacampa, a la cabeza, tiene ya experiencia en el asunto. Logró que Rudy Fernández alargara un año su estancia en el club y se aseguró un buen pico, 4,7 millones de euros, en el caso de que Ricky se marche antes de que expire su contrato en 2011. Aun así, será difícil retenerle. Es un portento y no es extraño que, a sus 18 años, sea ya portada de las mejores revistas y páginas web especializadas en la NBA. Si se va ya, habrá que entenderlo. Su cotización sube como la espuma y apunta a un segundo puesto en el draft, algo que ni siquiera logró Pau Gasol, tercero en 2001.