El pacto entre Puigcercós y Carod descompone el sector crítico de ERC

En 48 horas, el presidente de Esquerra Republicana (ERC), Joan Puigcercós, casi ha sellado definitivamente su ya amplio liderazgo en el partido. Si el jueves se zanjó la guerra intestina con la renuncia de Josep Lluís Carod Rovira a presentarse a unas eventuales primarias, ayer el líder independentista se desayunó con un artículo en el diario Avui del ex consejero y presidente de la fracción crítica Reagrupament, Joan Carretero, en el que planteaba la creación de un nuevo partido que tenga como objetivo la proclamación unilateral de independencia. Además, Carretero daba a entender que él mismo y los afines que le quieran seguir podrían dirigir la nueva formación, disminuyendo así la militancia de Esquerra.

El líder de Esquerra invita a dejar el partido a los que no se sientan cómodos

El movimiento de Carretero diluye sobremanera la oposición interna de ERC a Puigcercós y su equipo. Si Carretero y los suyos se escindieran, el próximo congreso de ERC, que se celebrará el próximo verano y en el que se prevé modificar los estatutos, sería un paseo militar para Puigcercós, sin oposición.

De eso se quejó ayer Uriel Bertran, diputado y líder de la otra corriente crítica, Esquerra Independentista. Bertran manifestó que su grupo sí quiere seguir en la disciplina de ERC, ya que "sólo dentro de Esquerra se puede trabajar por la liberación de los Països Catalans". La marcha de Carretero deja con menos masa crítica a los contrarios a la dirección, que tuvieron su cénit en el congreso de ERC, y con unos pocos miembros en el consejo nacional del partido para hacer oposición.

Bertran se queda solo ante el aparato de Puigcercós, que además incorporará a los seguidores de Carod Rovira a la ejecutiva, por lo que el oficialismo en Esquerra será casi total. El líder de Esquerra Independentista llamó ayer a Carretero a recapacitar y quedarse en el partido. Lo hizo por segunda vez porque el viernes por la noche ambos dirigentes departieron sobre la cuestión.

El presidente de Esquerra, lejos de ver los toros desde la barrera, invitó ayer a "abandonar el partido" a todos aquellos que no se sientan cómodos. Puigcercós indicó, además, que la salida de Carretero podría ser positiva, dado que construiría "un espacio independentista de centro-derecha", dando a entender que el líder de Reagrupament no sigue la línea socialdemócrata que dice mantener la dirección republicana. Bertran repuso al presidente de ERC: "Si ha sido ocho años alcalde de Puigcerdà y consejero de la Generalitat propuesto por Puigcercós, no debe de ser tan malo".

El nuevo partido que propugna Carretero debería funcionar en 2010 -año en el que está previsto que se celebren las elecciones catalanas, en noviembre- y tener como eje programático la proclamación unilateral de la independencia. El líder de Reagrupament da este paso motivado, dice, por el poco entusiasmo que suscitan en la sociedad catalana los partidos actuales. El ex consejero de Gobernación expone: "Ni Estado plurinacional, ni España plural, ni federalismo de ninguna clase. En España no hay nada que hacer".

Por su parte, ante el río revuelto, el secretario general adjunto de Convergència, Felip Puig, vaticinó un adelanto electoral por la situación de ERC.