Contribuyente
Vista la situación, el contribuyente tiene bastantes motivos para quejarse. Pero deberían empezar a protestar también sus hijos y sus nietos: va a caerles una factura de las que hacen temblar el misterio.
Cada día se añade a la deuda pública un montón de deuda. Buena parte de ella es inevitable: subsidios por desempleo y demás. Otra parte es menos inevitable y más cabreante: subvenciones a la ineficiencia financiera, subvenciones a la incapacidad creativa y otras cosas de este tipo. Y luego hay una tercera parte de pura fantasía, perfectamente prescindible, que se improvisa sobre la marcha.
Deduzco que ese tercer apartado de la deuda va a incrementarse de forma notoria a lo largo de la legislatura. Zapatero anunció ayer que la publicidad en TVE sufriría una reducción "drástica", y no dijo más. Ni cuándo, ni cuánto. Ni con qué consecuencias, cosa aún más importante. Aunque parezca que el anuncio esté relacionado con la necesidad gubernamental de asegurarse la complicidad de los grandes grupos privados de comunicación (y a veces las cosas son exactamente como parecen), la idea en sí tiene sentido. El actual mecanismo de financiación de la televisión pública española, vía contribuyente y vía anuncios, con el añadido de un déficit endémico, vicia la competencia en el sector. En sus vagas conclusiones, el comité de sabios ya recomendó hace tres años que hubiera menos anuncios.
Ahora bien, luego está el contexto. Es decir, la crisis. Si se reducen los ingresos publicitarios en TVE, aumentará el déficit: paga el contribuyente. A no ser que el Gobierno, con lo que está cayendo, quiera implantar un canon como el británico o el italiano, en cuyo caso pagaría el contribuyente. También puede ser que el plan consista en desmantelar TVE, en estos momentos la primera en audiencia; quedaría un poco raro, después de tanto lío con el comité de sabios, el expediente de regulación de empleo y el proyecto de nueva sede.
Veremos en qué acaba todo esto, cuando se lleve al Parlamento (hay que suponer que ocurrirá, aunque lo diga Zapatero) la nueva ley del sector audiovisual. Sea como sea, da la impresión de que esta legislatura se nos va a hacer larguísima.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.