La Semana Santa deja la cifra de muertos en carretera más baja de la historia

Cuando parecía que el margen para evitar las muertes en carretera comenzaba a languidecer por los descensos continuados de los últimos años, las vacaciones de Semana Santa han confirmado que es posible seguir ganando terreno a los accidentes de tráfico. Este periodo vacacional ha sido tradicionalmente un periodo muy trágico que se resistía a seguir la tendencia general de descenso del resto del año.

En 2008, por primera vez en la historia, los fallecidos no llegaron al centenar (fueron 66 los muertos), lo que suponía un 40% menos que el año anterior. Este año, a falta de cuatro horas para el cierre de la Operación especial de Semana Santa, la Dirección General de Tráfico había registrado 43 accidentes mortales en los que habían perdido la vida 45 personas y otras 11 habían resultado heridas graves. Esto supone un 26% menos que el mismo periodo del año anterior. Y la cifra más baja registrada en este periodo vacacional. Aún así, cada día fallecieron en accidente de tráfico casi cinco personas.

Los desplazamientos de largo recorrido cayeron un 7,7% con respecto a 2008

Aunque este año los desplazamientos de largo recorrido (los de más de 100 kilómetros) se han reducido un 7,7%, no parece ésta ser la única explicación para este acusado descenso, porque en 2006 se produjo el mismo número de viajes y murieron 110 personas en las carreteras españolas.

Aunque hoy presentará los resultados definitivos de la Operación Especial, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ya calificó ayer el resultado de "objetivamente bueno". "Estamos en el buen camino", subrayó, aunque como en todas sus intervenciones relacionadas con la seguridad vial, matizó que "no se pueden lanzar las campanas al vuelo". En la última jornada de Operación Retorno, los vehículos se concentraron especialmente en las vías de acceso a las grandes ciudades de las cinco comunidades autónomas en las que ayer era festivo: Cataluña, País Vasco, Navarra, Baleares y Comunidad Valenciana. La peor parte se la llevaron los conductores de las carreteras catalanas, vascas y valencianas, en las que se registraron durante toda la jornada importantes retenciones de tráfico, concentradas sobre todo por la mañana y a última hora de la tarde. La circulación fue especialmente complicada en los accesos a Barcelona.

En Sevilla, la Guardia Civil detuvo en la madrugada del lunes a un conductor de 39 años que circulaba en su vehículo en sentido contrario por la carretera SE-30 y que dio positivo en la prueba de alcoholemia, informa Efe.