Baja la calificación de Caixa Catalunya, Caixa Galicia y Caixanova
Fitch lo atribuye al "agudo ajuste" de la economía española y al 'ladrillo'
Fitch Ratings rebajó ayer la calificación como emisores de deuda a largo y corto plazo de Caixa Catalunya, Caixanova y Caixa Galicia. En los tres casos, la agencia de calificación de riesgo ha destacado el "impacto negativo del agudo ajuste" en el sector inmobiliario debido al impacto de la crisis en la economía española en los recursos y rentabilidad de las entidades "en el contexto de una base de capital estrecha".
Fitch ha situado el rating a largo plazo de Caixa Catalunya en BBB+ con perspectiva "estable", desde la calificación A con perspectiva "negativa", mientras que recortó la de corto plazo de F1 a F2. La agencia considera que, mientras los nuevos gestores de la caja catalana han tomado "medidas proactivas para mejorar su rentabilidad (incluyendo un control estricto de los costes), la calidad de los activos, la liquidez y capital", la economía española y el mercado de viviendas han sido afectados por la crisis financiera global "haciendo que un vuelco rápido sea difícil de lograr".
A Caixanova le rebaja su calificación como emisor a largo plazo a A- con perspectiva negativa desde A, aunque también apunta que la entidad planea revisar su portafolio de inversiones para mejorar su perfil de riesgo. La deuda a corto plazo la sitúa en F2 desde F1.
Para Caixa Galicia, Fitch sitúa la calificación a largo plazo en BBB+ con perspectiva "estable", desde A, debido al "brusco deterioro de la economía española", mientras que recortó la de corto plazo de F1 a F2.
No obstante, Fitch también le reconoce a Caixa Galicia "los avances perceptibles" logrados por la entidad a la hora de reducir la concentración de riesgos, gestionar la liquidez, la calidad de los activos y los niveles de capital.
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