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Gallois dice que España es la que más tajada saca en EADS

El grupo sale de pérdidas pero se enfrenta a la caída de pedidos

El consejero delegado del gigante aeronáutico EADS, el francés Louis Gallois, aprovechó ayer la presentación de resultados del grupo europeo en Múnich para intentar espantar el fantasma de que España es "un socio maltratado" en el consorcio. Al contrario, Gallois hizo un amago de reproche al Gobierno español, que teme una dilución de poder y autonomía en la recién estrenada integración en Airbus de la división de Aviación de Transporte Militar que capitaneaba Carlos Suárez, recién relevado por Domingo Ureña-Raso.

"Vendemos plantas en Alemania o Reino Unido. Al menos, España podría reconocer que, en España, no", espetó el primer ejecutivo de la empresa que encarna mejor las ventajas de sumar fuerzas, pero también los quebraderos de cabeza inherentes al rompecabezas de la integración europea. Ante la prensa internacional, al menos en cuatro ocasiones, Gallois reiteró que España, con un 5,5% del capital de EADS y con participación del doble en algunos proyectos industriales emblemáticos del consorcio como el A350, "es el país que más se ha beneficiado" en términos de empleo, inversiones y tecnología del invento de EADS. De "malentendido" calificó las recientes tensiones con el Gobierno español, que tendrá ocasión de tratar en su próxima visita a España en abril.

Una cancelación del A400M supondría costes de 5.700 millones de euros

Para el rival europeo de Boeing, ayer debería haber sido una fiesta. En el Museo de la Aviación de Múnich, EADS demostró que sobrevuela por ahora desde elevada altura los estropicios de la crisis y de sus propios retrasos, tras haber dejado atrás sus abultados números rojos y haber ganado 1.572 millones de euros en 2008, con una facturación (43.300 millones) y un resultado neto operativo (2.800 millones) que batieron las previsiones del propio grupo y de los analistas.

Pero 2009 ha empezado a aguarle la fiesta. No sólo por la velocidad a la que se ralentiza la demanda de unas aerolíneas que mendigan financiación para comprar aviones (los pedidos previstos oscilan entre los 300 y los 400, frente a los 777 de 2008), sino por la incertidumbre que planea sobre uno de los programas estrella de EADS, el A400M, que se ensambla en Sevilla.

El futuro avión de transporte militar no tendrá parangón. Pero tampoco tiene fecha de lanzamiento fiable. Pasarán tres años entre el primer vuelo de prueba y el inicio de la comercialización de estas aeronaves capaces de aterrizar en condiciones límite.

¿Cuándo será el primer vuelo, inicialmente previsto para el año pasado? No está claro siquiera que despegue en 2009. "El calendario no era realista, ningún avión militar ha tardado en desarrollarse menos de 12 años", enfatizó Gallois. El A400M, encallado en el desarrollo de los motores, fue lanzado en 2003. EADS admitió ayer públicamente la posibilidad de que los gobiernos clientes del programa plieguen velas.

Una cancelación del programa, valorado en 20.000 millones, supondría para el grupo costes de 5.700 millones. EADS considera "muy improbable" la anulación global, porque esa decisión requeriría unanimidad y Francia y Alemania ya han dicho que siguen adelante y están por negociar calendarios y compensaciones.

Con 50 y 60 pedidos, respectivamente, son los dos principales países que más pedidos han realizado de los 192 sobre la mesa. España tiene 27. Y le sigue Reino Unido, aparentemente el país con más reticencias, Bélgica, Turquía y Luxemburgo. Malaisia y Suráfrica también tienen encargados A 400M. El retraso conllevó una factura extra para EADS de casi 1.400 millones en 2007. En las cuentas de 2008, el impacto negativo fue de 704 millones.

El presidente de EADS, Louis Gallois, durante la presentación de resultados ayer en Múnich.
El presidente de EADS, Louis Gallois, durante la presentación de resultados ayer en Múnich.EFE

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