El piso de lujo también se para
Abandoibarra se retrasa ante la falta de compradores - Los expertos señalan ventas congeladas y marcha atrás en pisos desde 7.500 euros el metro cuadrado
En 2005 los pisos de lujo se vendían en Bilbao en un mes. En 2006 se tardaba apenas dos. Un año después los compradores se lo pensaban hasta tres meses y desde mediados de 2008 la decisión está prácticamente paralizada. Las promociones que todavía tienen pisos en venta apenas si se mueven, hasta el punto de que las promotoras, que hasta ahora vendían directamente a sus clientes, han empezado a soltar algunas unidades a las inmobiliarias, para ver si ampliando la base de datos de clientes se pueden colocar algunos más.
El caso es que la mayoría de las promociones están paradas. En Abandoibarra donde están previstas unas 940 viviendas de alto nivel -por encima de los 8.000 euros el metro cuadrado-, casi todas están sufriendo retrasos. "La parte positiva es que no se ha parado la construcción", apuntan desde una promotora. "Las obras van, pero más despacio. Acompasamos el ritmo de construcción a las ventas", explican.
"La parte positiva es que las obras no se han parado", dicen los promotores
La realidad es que prácticamente no se vende. En 2005 y 2006, cuando el dinero y los proyectos discurrían de forma paralela, en Bilbao centro se proyectaron casi 1.700 pisos de lujo. De ellos la mitad están todavía en el limbo; la mayoría, precisamente en Abandoibarra. El resto renquea en el mercado con muchas dificultades para ser vendidos. Se trata de pequeñas promociones de hasta veinte viviendas en edificios rehabilitados. Algunos proyectos de relumbrón, como de Jean Nouvel, esperan en el armario, y lo normal es que se arrinconen proyectos esperando un momento más propicio.
Las promotoras responden a la pregunta de cuál es el ritmo de venta con un inquietante "todavía quedan pisos". Todos los expertos del sector estiman que el segmento alto está congelado.Es cierto que los datos reales sólo los conocen las propias promotoras, ya que este tipo de pisos los comercializan directamente. "Los agentes de la propiedad inmobiliaria sabemos que hace mucho frío ahí arriba", pero así como "tenemos" datos fiables de las ventas en el resto de los segmentos, en el caso de las viviendas de lujo "las promotoras no los sueltan", dice un representante.
Pero la realidad es tozuda, y los síntomas de parón son más que evidentes. Pisos en Abandoibarra que tenían que haber estado terminados a finales de este año van a estar listos para entregar al tiempo que se termine la Torre Iberdrola, prevista para finales de 2011, dando tiempo para que amaine la crisis y el mercado, la Bolsa y los bolsillos se recuperen.
"Hay gente que había reservado una y dos viviendas, pero el bajón de la Bolsa les ha aconsejado aplazar la compra", explican desde una de las promotoras afectadas.
Los vecinos de la torre más occidental de dos de Isozaki en Uribitarte comprobaron con cierto espanto hace cinco semanas, al constituir la comunidad de vecinos, que muchos de los pisos estaban todavía a nombre de la promotora. "En el sorteo para adjudicar el primer presidente de la comunidad, los pisos que salían consecutivamente eran de la promotora. Costó que llegara un nombre propio", cuenta. Atrás quedan las mañanas ajetreadas de las inmobiliarias que prácticamente en una jornada liquidaban todo lo que ponían a la venta, "como varias promociones junto a la curva de Elorrieta", citan fuentes del sector.
El caso es que si la media de gasto en un piso en Bilbao es de entorno a 4.000 euros metro cuadrado, en los pisos de lujo, del centro esa cifra se multiplica por dos y por tres, IVA aparte. Es el momento de elegir el mejor apartamento, la mejor altura y posiblemente hasta un buen precio entre los más altos. El problema es que pocas veces tanta oferta ha coincidido con tanta falta de liquidez. En Hurtado de Amézaga hay 12 apartamentos en venta de 47 y 77 metros, cuyos precios oscilan entre 540.000 y 830.000 euros. La sugerente fachada proyectada por Iñaki Aurrekoetxea no es de momento un reclamo que venza los agobios económicos.
Problemas financieros
Malos tiempos para el ladrillo. Ereaga y Urazca en concurso de acreedores y Iurbenor a punto, tras tener que apearse del ambicioso proyecto urbanístico Puerta de Bilbao, en Barakaldo. Más recientemente, la empresa Vias ha dejado en la estacada a 160 familias que pagaron medio millón de euros por un piso de lujo en una de las Torres del Patronato, en Santurtzi. Todos ellos han hincado la rodilla, después de años de ingentes beneficios y crecimiento casi exponencial.
Otros siguen sufriendo día a día los golpes de la crisis y el frenazo del consumo, como el grupo Urvasco, que tienen numerosos frentes abiertos en Bilbao y en Sevilla. Los problemas siguen tras la venta de su división de parques eólicos. Ha congelado el proyecto en los terrenos de la antigua fábrica de Cruzcampo, en Sevilla mientras intenta evitar un embargo de Unicaja. Su constructora, Vizcaína de Edificaciones, está metida en el edificio de Abandoibarra diseñado por Krier, en las Torres Isozaki, en la Torre Iberdrola y en el congelado edificio del RAG proyectado por Jean Nouvel, entre otros. Y el mercado, paralizado.
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