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El jurado declara dos culpables por el caso de las facturas falsas de Sevilla

Los urdidores son responsables de malversación de fondos y falsedad documental

El jurado popular declaró ayer por unanimidad culpables de malversación de fondos públicos y falsedad documental a José Marín -ex secretario del distrito Macarena de Sevilla capital, del PSOE- y al contratista José Pardo por entender que no se ejecutaron obras que sí se pagaron.

Este caso, conocido como el de las facturas falsas del Distrito Macarena, se sentaban en el banquillo a Marín, que fue secretario del distrito entre febrero de 2002 y octubre de 2003 y Pardo, contratista de las obras. En su objeto del veredicto, el juez sólo incluyó como facturas presuntamente falsas a dos referidas a unos módulos de la barriada de San Diego que no se demolieron y otras cuatro obras que sólo fueron parcialmente ejecutadas, frente a las 28 facturas falsas en que se basó la primera acusación.

El jurado considera probado que se pagó por obras que no se ejecutaron

El juez hizo también uso de una facultad extraordinaria prevista en la Ley del Jurado, que hasta ahora no se había utilizado nunca en Sevilla, para retirar la acusación contra Manuel Portela, militante del PSOE y colaborador municipal que presuntamente era el encargado de supervisar la conclusión de las obras en el distrito Macarena. El veredicto de ayer fue leído por la portavoz del jurado, quien dijo que se mostraban contrarios a un posible indulto.

Para Marín la Fiscalía había solicitado tres años y medio de cárcel y ocho de inhabilitación por un delito de malversación de fondos públicos y un año de cárcel por falsedad en documento público, a lo que añadía una multa de 900 euros. Para Pardo el fiscal solicitó 21 meses de cárcel y 1.350 euros de multa por un delito continuado de falsedad y dos años y medio de cárcel por malversación. Por su parte, el Partido Andalucista (PA), personado como acción popular, pidió 12 años de cárcel para Marín y 10 para Pardo. El fiscal consideraba que Marín era el centro de una red que durante el año 2003 facturó al Ayuntamiento de Sevilla por obras menores que nunca se ejecutaron o que se cobraron dos veces. El secretario del distrito Macarena era quien decidía las obras que se hacían y quien, supuestamente, adjudicó muchas de ellas a su ex socio José Pardo, también acusado, que presuntamente facturó 20.254 euros gracias a facturas falsas. El tercer acusado era Manuel Portela, que como colaborador del distrito tenía que supervisar que las obras. Pero el juez decidió no imputar finalmente delito alguno a esta tercera persona.

La celebración de este juicio ha sufrido algunos retrasos. Estaba previsto que comenzara en octubre de 2008, pero una maniobra de Marín logró dilatar este proceso. La Fiscalía y los abogados de los imputados barajaron incluso cerrar un acuerdo para no tener que llegar a juicio.

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Finalmente la vista se ha celebrado. Y la decisión del jurado popular provocó ayer que el PA reclamara la dimisión de del alcalde de la capital hispalense, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE). La secretaria general de los andalucistas, Pilar González, sostuvo que "Sevilla no se merece un alcalde salpicado por un caso de corrupción", según declaró a los periodistas en la puerta de la Audiencia Provincial de Sevilla a los pocos minutos de conocerse el veredicto. En opinión de González, "la Justicia ha puesto a cada uno en su sitio" y ha acreditado que se han cometido delitos "muy graves" que "atacan al sistema democrático".

Por su parte, la portavoz del Gobierno del Ayuntamiento de Sevilla, Maribel Montaño (PSOE), dijo que el consistorio acata la decisión del jurado, aunque recordó que los acusados podrían recurrir. Según Montaño, la actitud de respeto de su partido hacia los tribunales contrasta con "la postura que despliega el PP en el caso de la investigación que mantiene el juez Baltasar Garzón". "Nuestra actitud es la de respetar los procedimientos judiciales, tanto si gusta como si no lo que dictaminan".

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