Los políticos desafinan en Pinto
Agresiones, juicios y sospechas en la vida municipal del pueblo
Tras la barra del Bar Manolo, a pocos metros del Ayuntamiento de Pinto, Carlos charla con uno de sus clientes. "Estos que se han marchado son los asesores de Reyes", le explica. El otro resopla. "A ése un día le van a dar un susto", añade. Reyes es Reyes Maestre, el concejal de Juntos por Pinto que comenzó la legislatura gobernando con el PP y la acabará con socialistas e IU, tras apoyar una moción de censura. Entremedias pasó de rechazar de plano el proyecto del Espacio del Motor a considerarlo imprescindible. De poner una denuncia a su hoy socio -el alcalde Juan José Martín (PSOE)- por uso de información privilegiada, a retirarla. De llevar a la fiscalía una permuta de suelo que consideraba lesiva, a estar dispuesto a estudiar informes para hacerla.
Reyes Maestre se ha convertido en la figura central de la política pinteña. "Él personaliza lo que transmitió Mariano Rajoy en su visita al municipio", opina un miembro del PP madrileño. Aquel día, el presidente popular dijo: "Algo huele a podrido en Pinto". Desde entonces, todos parecen estar bajo sospecha.
Pero la sospecha no es nueva en esta localidad de 42.445 habitantes situada a unos 20 kilómetros al sur de Madrid. En 1993, el único alcalde que hasta ese momento había conocido Pinto durante la democracia -primero bajo las siglas del PCE y luego de IU-, Carlos Pénit, era condenado por el Tribunal Supremo a seis años y un día de inhabilitación por un delito de prevaricación en la concesión de licencias. Dos años más tarde fue indultado por el Gobierno de Felipe González. Hoy es uno de los firmantes de la moción de censura y ocupa la Concejalía de Urbanismo.
También es polémico el ex alcalde socialista Antonio Fernández (1995 y 2005). Fue denunciado por la Fiscalía de Madrid ante la Audiencia Provincial por enriquecimiento ilícito, aunque el caso fue archivado. Varias de sus decisiones en materia urbanística aún están siendo investigadas en los juzgados de Parla. "Pero a Antonio se le recordará por su viaje de casi dos meses por Latinoamérica cuando era alcalde", reconoce un regidor socialista, que mantuvo tensas relaciones con Fernández durante sus años de gobierno en Pinto.
Maestre ha tomado el testigo. Fue uno de los fundadores de Juntos por Pinto en 2002 y un año más tarde se convirtió en concejal. En su ideario había entonces dos banderas: impedir el proyecto del Espacio del Motor, que permitiría la construcción de 7.500 viviendas y un circuito de fórmula 1, y desalojar a los socialistas del poder. Ambas se cumplieron en 2007, tras las elecciones en las que su partido sacó dos concejales. Pactó con el PP y se convirtió en primer teniente de alcalde y concejal de Deportes y Cooperación.
El idilio duró seis meses. En diciembre anuncia que ha cambiado de opinión. Su partido se divide y Maestre se enfrenta a Juana Valenciano. La entonces alcaldesa del PP, Miriam Rabaneda, decide apoyar a Valenciano, convencida de que Reyes Maestre nunca pactaría con socialistas y con IU.
No andaba desencaminada. PSOE e IU habían reprobado al portavoz de Juntos por Pinto y le habían llamado tránsfuga. Además, Maestre había llevado a los tribunales al portavoz socialista, Juan José Martín, y había denunciado una permuta de terrenos que beneficiaba a un empresario vinculado a Pénit.
Sin embargo, lo que entonces era impensable se materializó tras casi seis meses. El 5 de diciembre, Maestre, Pénit y Martín firman ante un notario de la localidad un acuerdo de 100 puntos que les aupó al gobierno. Contiene un apoyo al Espacio del Motor y la decisión de estudiar el desbloqueo de la operación de permuta de suelo. En el acuerdo no aparecía un punto que también ha sido clave: la pareja de Reyes Maestre fue nombrada consejera delegada de la empresa pública Aserpinto.
Detrás de la moción, los populares colocan a los promotores del Espacio del Motor: les vinculan con la venta de la vivienda de Reyes Maestre y con la financiación de la Fundación Pinares, que comparte sede con el PSOE y está presidida por el ex alcalde Antonio Fernández. Sólo un mes después de convertirse en regidor, Juan José Martín ya ha tenido que declarar ante la juez que lleva el caso.
"Los plenos son algo insufrible por la agresividad", explica una concejal. Gritos, abucheos, carteles... e incluso conatos de agresión. Reyes Maestre luce un collarín desde el último pleno, en el que fue denunciado por un menor al que rompió la chaqueta.
La situación económica del Ayuntamiento es precaria. La pasada semana el pleno solicitó cerca de tres millones de euros al Gobierno para pagar las nóminas de los trabajadores. Hasta hace un año, permanecían las calles dedicadas a Antonio Fernández o Carlos Pénit. El PP decidió cambiarlas por nombres de músicos y compositores. Al parecer, los políticos desafinan en Pinto.
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