El más bajito vuela sobre todos

Pasa a la página siguienteEl más bajito fue el más enérgico y contundente volador en el concurso de mates de la NBA. Nate Robinson, Krypto-Nate, como quedó bautizado por el color verde que utilizó para hacerle el juego a Superman Dwight Howard, ganó el evento en el que participó por primera vez un baloncestista no estadounidense, Rudy Fernández. El escolta español regresa a Portland complacido por la manera en que fue arropado por el público, que expresó su desacuerdo por la baja puntuación que le otorgó el jurado, formado por cinco ex jugadores de los Suns: Larry Nance, Kevin Johnson, Dan Majerle, Tom Chambers y Cedric Ceballos.

Rudy quedó el último en las dos primeras rondas, con 84 puntos, sólo uno menos que J. R. Smith, tres menos que Robinson y 16 menos que Howard, que logró los 100 posibles. Robinson superó a Howard en la final gracias a un mate tras saltar por encima del pívot de los Magic, de 2,11 metros, que no puso mayor inconveniente en prestarse a hacer de parapeto ante la canasta. Fue una proeza para el base de los Knicks, que sólo mide 1,75. Robinson recuperó así el cetro de la especialidad que había ganado en 2006 y que en 2007 fue para Gerald Green y en 2008 para Howard.

En su primer intento, el español vistió la camiseta con el 10 de Fernando Martín

"Mi segundo mate ha sido difícil de ejecutar. Salir desde el lado contrario para machacar con una sola mano en el sentido contrario de donde me ha lanzado Pau el balón es complicado. Me ha salido bien y la gente se ha dado cuenta. Por eso ha abucheado un poco [a los jueces]. Pau me ha dicho que era un tongazo", concluyó Rudy tras esa segunda oportunidad, en la que era obligada la ayuda de otro jugador y escogió a Pau Gasol.

El pívot de los Lakers lanzó el balón a la parte posterior del tablero mientras que Rudy corría desde un lado para atrapar el rebote en corto, remontar en el aire dándose media vuelta y machacar. Falló varios intentos y se agotaron los dos minutos de los que disponía. Consumó el mate en una tentativa adicional, prevista en las reglas. "Voy a recordar esta competición como algo inolvidable para el baloncesto español e internacional porque era la primera vez que un jugador no estadounidense estaba en el concurso. Esperemos que el año próximo pueda estar en el de triples y dar más guerra todavía. Me voy con la sensación de haber dado la cara", dijo Rudy.

El español, en su primer salto, apeló a una cuestión sentimental. Vestía su camiseta roja de los Blazers con el número 5 y, cuando inició la carrera, se la quitó para lucir la que llevaba debajo, la camiseta negra con el antiguo 10 del equipo, la del primer jugador español que jugó en la NBA, Fernando Martín, en la temporada 1986-1987, que falleció en un accidente de tráfico el 3 de diciembre de 1989. Su mate, al primer intento, fue contundente. "Era una oportunidad para darle las gracias. Fue el que abrió la puerta de la NBA a España. Lo merecía y espero que a su familia le haya gustado", explicó.

El escolta mallorquín desveló que, de haber llegado a la final, tenía pensado ejecutar el mate a lo Djalminha: elevar el balón hasta el aro con un autopase efectuado con los pies antes de machacar. "Pensaba que ese mate me podría dar una puntuación más alta si estaba en la final", comentó Rudy, feliz pese a no pasar el corte. "Cuando llegue a casa, voy a pedir el vídeo para mirarlo como si fuera un niño pequeño. Es histórico para el mundo internacional del baloncesto e increíble para mí. Me acordaba de cuando me levantaba a las cuatro de la madrugada para ver el concurso de mates y ahora he podido vivirlo en primera persona".

Robinson ganó una final en la que no decidió el jurado, sino que se computaron los votos de los aficionados llegados a través de mensajes de móvil y de la página web de la NBA. Venció el base de los Knicks con un 52% de los sufragios a pesar de que Howard trató de exprimir su imaginación, entró en una cabina de teléfonos para volver a ataviarse con la capa roja de Superman y utilizó una canasta más alta de la habitual, en la que el aro está situado a 3,05 metros del suelo.

En el concurso de triples, Jason Kapono no logró igualar el récord de tres títulos consecutivos. Venció Daequan Cook, escolta de los Heat. Larry Bird y Craig Hodges mantienen todavía su hegemonía en el palmarés de la competición. Derrick Rose, base de los Bulls, se adjudicó a su vez el concurso de habilidades.

Conferencia Oeste, 146 - Conferencia Este 119