18 obreros chinos amenazaron con tirarse de una obra por no cobrar en tres meses
Los trabajadores bajaron del edificio cuando Ferrovial les garantizó los pagos
Llevaban tres meses sin cobrar y no podían pagar el alquiler de sus viviendas, así que optaron por la solución más drástica para reclamar el pago de su salario. Un grupo de 18 obreros de origen chino se subieron a la última planta de un edificio que construye Ferrovial en Manresa (Bages) para reclamar el cobro de las tres últimas mensualidades. Cuando llegaron a lo más alto del inmueble, amenazaron con lanzarse al vacío si no se les remuneraba de inmediato, según explicaron compañeros de trabajo de los obreros.
La protesta arrancó a primera hora de la mañana. Los Mossos d'Esquadra recibieron el aviso a las 10.25 y enseguida acudieron también refuerzos de la policía local. Los trabajadores reclamaron poder hablar con la dirección de la empresa Ferrovial, aunque en realidad era, según fuentes policiales, Consorcio de Construcciones y Anexos, una firma subcontratada por ésta, la que debía pagar los retrasos.
Ferrovial asumirá las deudas de la subcontratada que empleó a los obreros
Varias empresas acumulan nóminas sin pagar a sus trabajadores
Los obreros que se quejaban hallaron pronto un interlocutor para buscar una salida al conflicto. Según explicó un portavoz de Ferrovial, el jefe de obra de la promoción de viviendas subió a negociar con ellos. Ya pasadas las 13.00, los trabajadores suspendieron su protesta y bajaron a la calle sin mediar palabra con los medios de comunicación que se desplazaron hasta allí. Fuentes de la policía catalana aseguraron que ellos no intervinieron en las negociaciones con Ferrovial, pero que de cualquier modo todo transcurrió de forma pacífica.
Un portavoz de la empresa de la familia Del Pino explicó que Ferrovial asumirá la deuda que tiene la subcontrata Consorcio de Construcciones y Anexos con los trabajadores chinos. Más adelante, la constructora retendrá esta cantidad a la empresa que ha recibido el encargo. Ferrovial no quiso comentar cuánto cobran los 18 obreros.
Los trabajadores chinos estaban empleados en una promoción de viviendas en la calle de Francesc Moragas, cerca de la plaza del Millenium y junto al río Cardener, una zona que fue deseo de las promotoras años atrás, antes de explotar la burbuja inmobiliaria.
Joan Martínez, compañero de los 18 trabajadores, confirmó que la empresa subcontratada había dejado de pagarles hace tres meses. Durante este tiempo, la situación de los trabajadores se agravó mucho. Martínez explicó que desde hacía dos días estos empleados estaban "sin casa" porque dejaron de pagar el alquiler. Ya no les quedaba dinero para hacerlo. Según el trabajador que habló en nombre de ellos, estaban en una "situación crítica".
Pero además de los trabajadores, incluso algún proveedor de la subcontrata, cuando se enteró de la situación, se planteó subir a la última planta del edificio si no cobraba sus facturas. Al final, tampoco cumplió sus amenazas. Las obras ayer estaban paradas, pero la calle se llenó enseguida de agentes a raíz del despliegue de la policía local y autonómica, que se aseguraron de que nadie puediera acceder a la promoción de viviendas.
Este impago de trabajadores no es un caso aislado, puesto que siguen creciendo a raíz de la crisis de liquidez, según explicó el Ministerio de Trabajo. Si la empresa acumula nóminas sin abonar, los obreros se quedan en un callejón casi sin salida: no pueden irse porque se considera que es abandono del puesto de trabajo y, por tanto, se quedan sin derecho al paro. La solución es ir al juez de lo social para que rescinda los contratos y se puedan rescatar los impagos a través del Fondo de Garantía Salarial.
Los sindicatos también observan un aumento de estos casos. UGT, por ejemplo, informó de varios casos: Egara Report (Terrassa), Catalunya Neta (Cassà de la Selva), Megadine Rubber (Vilanova i la Geltrú) e Industria de Técnica y Precisión (Cornellà). También Comisiones Obreras denunció que los trabajadores de Santa Oliva de Estructuras, Módulos y Sistemas, que monta los interiores de Inditex en todo el mundo, no cobraron la nómina del pasado mes de enero.
Por otra parte, el comité de empresa de YKK, multinacional japonesa dedicada a la fabricación de cremalleras y complementos textiles, denunció ayer que la compañía ha despedido a una veintena de trabajadores de la factoría de Tortosa (Baix Ebre) en las últimas dos semanas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.