"El desarrollo de Vitoria es básico para el de Euskadi"

P. Sí, porque algunos de esos proyectos llevan sobre la mesa más de una década...

R. Lo que hacemos es ordenar y alinear proyectos de larga maduración como soterramiento, estación intermodal o Casco Medieval, entre otros, con el día a día. Se trata de ponerlo todo en marcha de manera coordinada y con sentido para hacer de Vitoria esa capital de Euskadi que traccione hacia dentro y hacia fuera.

P. ¿Resulta más un marco teórico que práctico?

R. Hemos transformado la reflexión estratégica de todos estos años en un plan de gestión operativo. La hemos transformado en una síntesis técnica para que los directores de los departamentos municipales la conviertan a su vez en programas concretos. Es la partitura que van a interpretar y de la que tienen que emanar sus propuestas. Se trata, como decía, de alinear el día a día con el programa estratégico.

P. ¿Cree que a Vitoria le falta ambición como ciudad?

R. Creo que lo que necesita Vitoria es proyectarse al exterior, dejar de ser la ciudad que mira intramuros, que vive hacia adentro, y empezar a ser la que empieza a proyectarse hacia fuera. Ya es una ciudad con grandes servicios al ciudadano, una gran ciudad para viviR. Se trata de consolidar eso, mejorarlo para adaptarla a los retos que vienen y especializarla para convertirla en un motor de oportunidades.

P. ¿La transformación del Casco Medieval va a llegar hasta el punto de ser un atractivo para entrar a vivir?

R. Estamos en un momento en el que o convertimos al casco en un motor de crecimiento y atracción, o involuciona. El reto es ése, conectar las diferentes piezas de Vitoria, ensamblarlas y que la capital empiecen a funcionar como un único motoR.

P. ¿A qué piezas se refiere?

R. El plan de movilidad es un reto tremendo Va a cambiar la manera de entender Vitoria, garantizando además el compromiso medioambiental para varias generaciones. Vamos a especializar la capital de Euskadi como una ciudad del deporte, de élite por una parte, y de base por otra, con medicina avanzada e instalaciones de alto rendimiento y competición. Y, además, en una ciudad comprometida con los derechos de sus ciudadanos, y con un plus de representación como capital de Euskadi, la puerta de entrada a la comunidad.

P. El Gobierno vasco no confía demasiado, sin embargo, ni en la capitalidad ni en algunos otros proyectos.

R. Es absolutamente fundamental la colaboración interinstitucional.

P. ¿La contribución económica que el Gobierno hace a Vitoria resulta suficiente?

R. No hablo sólo de colaboración económica. Sin un buen programa de país no tenemos mucho que hacer, ni como ciudad ni como capital. Si no se entiende que el desarrollo de Vitoria es fundamental para el desarrollo de Euskadi, no vamos a ninguna parte, porque el plan director intenta responder precisamente a eso: ¿en qué podemos ser útiles a Euskadi, a la comunidad de personas que nos rodea?

P. Después de las fuertes inversiones que ha recibido Bilbao y han logrado su transformación, o las dotaciones culturales y en mejora de infraestructuras para San Sebastián...

R. Creemos que ha llegado la hora de Vitoria, porque se trata de poner este proyecto al servicio de Euskadi y de Álava. Es complementario. Se trata de montar la ciudad sobre la base de proyectos solidarios con todos los vascos; de desarrollar una ciudad que haga más competitiva a Vitoria, pero también Euskadi, y de redondear una capital de Euskadi con capacidad de oferta y de atracción.

P. Suena a exigencia al Ejecutivo.

R. No, no lo planteamos como una exigencia o una crítica a terceros, sino como una propuesta de la que queremos hacer partícipes y entusiastas al resto de instituciones y administraciones.