Olivas: "Ninguna empresa solvente se queda sin financiación"

El presidente de Bancaja, José Luis Olivas, aseguró ayer en la presentación de resultados de 2008 del Banco de Valencia, perteneciente al grupo, que "ninguna empresa solvente se queda sin financiación". Ante la constante queja de las organizaciones empresariales de que las entidades financieras han cerrado el grifo a los empresarios, Olivas comparó el crecimiento del 1% de la economía con el del incremento del crédito a la clientela obtenido por el Banco de Valencia, que se ha situado en el 5,53%, alcanzando los 18.414 millones de euros. "Los créditos han crecido más que la economía", contrapuso.

El consejero delegado del Banco de Valencia, Domingo Parra, ponderó la bajada de la demanda solvente de crédito y aseguró, en ese sentido, que no es que los bancos hayan endurecido las condiciones, sino que las condiciones de las empresas han empeorado y los riesgos para los bancos son mayores por su incidencia en los ratings. Con todo, se han producido más demandas de créditos para refinanciación de operaciones que para la inversión productiva o particular. El crecimiento crediticio registrado por el Banco de Valencia se ha producido "por efecto rebufo" de préstamos promotores, explicó Parra, quien cuantificó en un 9% el saldo vivo de la cartera hipotecaria.

El banco deja la gestión estratégica y se centra en una gestión táctica

Olivas insistió en que el aumento crediticio neto, que aunque ha aminorado el ritmo respecto a 2007, es "muy razonable" dada la situación que atraviesan los sectores productivo e inmobiliario. El presidente del Grupo Bancaja abundó en la complejidad del marco económico para destacar los resultados del Banco de Valencia, que ha obtenido un beneficio neto consolidado de 150,3 millones, un 10,65% más que en 2007, cumpliendo los objetivos que se marcó. El banco ha aumentado un 12,97% su margen de intermediación, aunque el acelerado deterioro de las variables macroeconómicas han minorado el ritmo del aumento del negocio, que ha alcanzado 35.900 millones, un 5,15% más. Su ratio de eficiencia se ha afianzado en el 34,90%.

En cuanto al ratio de morosidad, experimentó un crecimiento de 2,35 puntos respecto a 2007, situándose en 2,99 (el sector cerró el año con una media de 3,5), con una cobertura del 79,8%. En cuanto a su tipología, la mayoría se ubica en el sector promotor y en préstamos hipotecarios de particulares no residentes. Según refirió Parra, la morosidad está creciendo más rápido en particulares que en personas jurídicas, pese a que éstas representan el 70% de la mora.

Aunque no desveló los objetivos del banco para este año, Parra auguró que, en un escenario equiparable al crecimiento del PIB, los créditos crecerían entre el 0% y el 2%. La previsión no contempla más de 3.000 operaciones en el ejercicio. El consejero delegado subrayó que estamos en el peor escenario de los últimos 20 años y que en 2009 el banco abandona las gestiones estratégicas y para centrarse en una gestión táctica día a día.