Casi 10.000 familias aún no tienen suministro eléctrico

Cuatro días después del temporal, 9.965 hogares en A Coruña y Lugo seguían anoche sin suministro eléctrico. Unión Fenosa, que había prometido reparar ayer a primera hora la totalidad de las averías, tenía a 6.300 clientes sin servicio al final del día. La eléctrica aseguró que centran sus esfuerzos en la comarca de Ortegal, pero evita dar una fecha para el reestablecimiento total del servicio.

Los técnicos y peritos han empezado a tasar los daños ocasionados por las fortísimas rachas de viento y nieve. Aparte de los perjuicios más visibles en las estructuras de los edificios y de que aún siguen despejando carreteras donde han caído tendidos eléctricos y árboles, la falta de electricidad mantiene sin calefacción a cientos de hogares. Los frigoríficos no funcionan, lo que está causando importantes pérdidas de carne en época de matanza.

"Seguimos con averías", cuenta el teniente alcalde de Curtis (A Coruña), "hay postes de la luz y cientos de metros de cable por el suelo"La eléctrica envió ayer a varios técnicos para evaluar los daños a esta población de 4.369 habitantes. Su alcalde había trasmitido sus quejas a Industria y a Fenosa y exigido soluciones el pasado lunes. "Cuando los técnicos llegaron, se quedaron asombrados por el desastre", lamenta.

Andrea, vecina de Cedeira, tiene una niña de dos años y vive en San Román, junto a otros tres familiares. No tienen luz ni agua ni teléfono desde las 21.30 horas del viernes. Su situación es tan caótica como crítica en una de las zonas más castigadas por el viento. "Sin luz, sin agua y sin teléfono", denuncia Andrea, "y son muchos días sin calefacción. A las ocho de la tarde estamos todos en cama" explica. No pueden ducharse, ni sacar agua del pozo.

A diario, sortean un camino emboscado por árboles "que no dan mucha confianza". Cuenta que cocinan con leña "patatas y huevos" y así no se arriesgan a abrir un congelador repleto conectado a un generador que comparten con un familiar para evitar que se estropee la carne de todo un año. "Ni siquiera encontrábamos pilas para la radio en todo Cedeira", añade."Nadie nos dice cuándo volverá la luz".

A pocos metros en la misma parroquia, vive la hermana de Andrea con tres hijos pequeños. Ambas esperan las ayudas extraordinarias prometidas por la Xunta para afrontar las pérdidas de los últimos días.

Los alcaldes populares de Ortigueira, Mañón y Cerdido han acordado solicitar la consideración de zona catastrófica para la comarca de Ortegal. Instan además a la Xunta a que adopte "todas las medidas posibles" e invitan a los ayuntamientos limítrofes a sumarse. El alcalde socialista de Cariño, José Luis Armada, se desmarca de la petición.