Touriño, Vara y Areces, a punto de enterrar sus suspicacias

Ninguno de los tres presidentes autonómicos socialistas que ayer se reunieron con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, encuadrados en el llamado "Frente del Noroeste", que se completa con Castilla y León, por la similitud de las características de sus comunidades, y contrarios a que Cataluña tenga un trato preferencial, sacaron la impresión de que el nuevo modelo de financiación autonómica está cerrado. Esa constatación les alivia porque echa por tierra el temor de que Zapatero hubiera pactado el pasado sábado con el presidente de la Generalitat, José Montilla, primero, y, después, con el presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, Manuel Chaves, el nuevo modelo de financiación autonómica que entrará en vigor en 2009.

Zapatero se reunió con el presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño, al que aceptó que en el nuevo modelo se ponderen dos variables: el envejecimiento y la dispersión de la población. Touriño, además, pidió "que se tenga en cuenta el coste de tener una lengua propia para su utilización en la enseñanza, en la Administración y en la justicia". El presidente gallego aseguró que su reunión estaba fijada hacía "una semana" y, por tanto, no se sintió molesto por la entrevista con Montilla y Chaves.

Peculiaridades

"Tengo la impresión de que no he entrado en un edificio ya construido sino que formo parte de su construcción". Con esta apreciación, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, se decía a sí mismo que sus razones para estar molesto por la reunión con Montilla y Chaves no tenían fundamento. "Estas reuniones prueban que el nuevo modelo lo vamos a hacer entre todos", dijo Vara, que se reunió junto al presidente de Asturias, Vicente Álvarez Areces, durante algo más de dos horas con Zapatero. Tanto Vara como Areces demandaron del presidente que el nuevo armazón financiero tenga en cuenta, al igual que en Galicia, la dispersión y el envejecimiento aunque con las peculiaridades diferenciales de cada una de ellas.

Ambos gobernantes coincidieron en que tenía que establecerse dos tramos para atender a la población mayor: uno hasta los 65 años y otro a partir de los 75. También fueron comunes las demandas de una financiación mucho mayor para Educación y Sanidad, y, desde luego, para transporte escolar y ambulancias. "Yo quiero que mi comunidad salga bien dotada pero también que no se debilite el Gobierno de España que es quien tiene que garantizar la cohesión y la igualdad de todos los españoles", expresó Fernández Vara. Zapatero recibirá hoy al presidente valenciano, del PP, Francisco Camps.