Martí i Pol visto por sí mismo, en un recital del Lliure

A Miquel Martí i Pol (1929-2003) no le gustaban los homenajes. Pero sí los recitales. Y ésa es la fórmula que Lluís Llach y los actores Jordi Dauder y Sílvia Bel han escogido para recordar al poeta de Roda de Ter con motivo del quinto aniversario de su fallecimiento. El piano de Llach y la voz de los dos intérpretes se unirán esta noche en la sala Fabià Puigserver del Teatre Lliure en Miquel, un recital con todas las entradas vendidas desde hace meses. "Es un recorrido por su pensamiento y su obra hecho a partir de la propia mirada de Miquel", señala Dauder, que es también el responsable de la dramaturgia y dirección.

Lo que Martí i Pol decía "de sí mismo, de las cosas que le rodeaban, de la lengua, del país, del amor y de la muerte" son el hilo conductor del recital concebido para una única función. "No es un espectáculo. Es un acto de homenaje hecho desde nuestro amor y nuestra pasión, con el deseo de mostrar que está más vivo y vigente que nunca", apunta Dauder.

Miquel ha sido largamente preparado por Llach y Dauder, buenos conocedores del poeta. Dauder señala que la música de Llach no es simplemente un acompañamiento, sino una presencia destacada a lo largo del recital. Eso sí, fiel a la palabra dada, Llach se limita a tocar: que nadie espere oírle cantar alguno de los temas que compuso inspirándose en los versos de su amigo.