_
_
_
_
_
LA INVESTIGACIÓN DESTAPA QUE LA CÚPULA LLEVABA DOS AÑOS FRACTURADA

Txeroki tenía una lista negra con etarras disidentes que iba a purgar

El jefe militar y el político se acusaron abiertamente ante los militantes

El capturado jefe militar de ETA, Garikoitz Aspiazu, alias Txeroki, iba a purgar a los etarras que estaban en sintonía con el ex líder del aparato político Francisco Javier López Peña, Thierry. Entre la información policial captada durante el seguimiento a Txeroki, figura un nutrido listado de activistas "disidentes" y "no fiables" por apoyar al bando rival. Thierry fue detenido en mayo y Txeroki lo ha suspendido de militancia. Ambos bandos han estado enzarzados desde hace dos años en una pugna, que ha llegado a manifestarse en campañas de mutuo descrédito.

López Peña había difundido entre militantes de su confianza un informe en el que se caracteriza de irracional y desleal a Txeroki. El brazo militar, por su parte, repartió un escrito en el que se acusaba al "aparato político y financiero" de ahogarles económicamente. ETA ha vivido bajo dos direcciones simultáneas, lo que explicaría los mensajes contradictorios recibidos por su trama civil.

El máximo desconcierto tuvo lugar a primeros de este año, cuando la dirección de Batasuna recibió instrucciones antagónicas sobre la estrategia ante las elecciones de marzo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_