Guy Ritchie deja intacta la fortuna de Madonna
El acuerdo de divorcio se sella hoy en un juzgado de Londres
Rápido, sin disputas millonarias ni cruce de acusaciones. Apenas un mes después de haber anunciado su separación, Madonna y Guy Ritchie acaban de cerrar un acuerdo de divorcio que hoy quedará registrado en un juzgado de familia de Londres, desmintiendo a quienes auguraban una reedición de la agria batalla protagonizada por el ex Beatle Paul McCartney y Heather Mills.
La estrella del pop pone fin a su segundo matrimonio con el bolsillo intacto, porque Ritchie ha renunciado a reclamarle hasta el 50% de las ganancias obtenidas durante sus ocho años de convivencia, como le permitirían las leyes inglesas. Titular de una considerable fortuna personal (casi 35 millones de euros, aunque el patrimonio de Madonna multiplica por diez esa cifra), el director de cine británico quiso centrar el litigio en la obtención de la custodia compartida de sus hijos, Rocco (biológico) y David, adoptado en Malaui. La cantante tiene otra hija, Lourdes, habida de una relación anterior con el bailarín Carlos León.
Según el régimen acordado, los dos pequeños, de ocho y tres años, dividirán su tiempo entre Inglaterra y EE UU, donde la artista se ha vuelto a instalar, cerca del jugador de béisbol Alex Rodríguez, con quien se la relaciona últimamente. Mientras tanto, Guy Ritchie podría haber comenzado una relación con la actriz británica Kelly Reilly, que actúa en el nuevo filme de Ritchie.
Registrados en los documentos legales como Ciccone M. L., de 50 años, y Ritchie G. S., 10 años menor, ninguno de los dos deberá comparecer esta mañana ante el tribunal de familia que sellará su divorcio.
