Socialistas e Iniciativa negocian la recalificación del Camp Nou
Los dos socios de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona, formado por el Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), han empezado las conversaciones para alcanzar un acuerdo sobre la futura recalificación del Camp Nou, que permitirá al Barça, en un futuro, la venta del solar del Miniestadi. Los socialistas y la junta azulgrana llegaron a un pacto para construir 1.625 viviendas y dejar libres 7.000 metros cuadrados para equipamientos. ICV, que ha renunciado a plantear una batalla de primera magnitud como cuando se opuso a la demolición de Sarrià, ha propuesto un plan alternativo: 1.080 pisos, la mitad protegidos, y 30.000 metros cuadrados para equipamientos.
Los vecinos celebran hoy una asamblea para estudiar su oposición al proyecto
"Ése es nuestro punto de partida. Hemos iniciado conversaciones y nuestros urbanistas han mantenido contactos e intercambiado propuestas con el grupo socialista", dijeron fuentes de Iniciativa, que recordaron que su portavoz, Ricard Gomà, ya dijo hace un mes que tenía la intención de "sumar" y de alcanzar un acuerdo.
Iniciativa es el único partido del Consistorio que ha concretado una contrapropuesta, pero su tesis no convence en absoluto a los vecinos que mantienen un rechazo frontal a la recalificación. "No ha cambiado nada: seguimos diciendo no a los pisos", dijo Adela Argelet, la presidenta de la coordinadora de asociaciones de vecinos y entidades de Les Corts que hoy celebrará una asamblea. En el encuentro, en el teatro del colegio Sant Ramon Nonat, participarán un arquitecto y un abogado.
La directiva azulgrana se mantiene en silencio y a la expectativa de cómo evolucionen las negociaciones entre los partidos. Y, los vecinos, mientras, sospechan que el proceso ha perdido gas por la gravedad de la crisis y la dificultad para que alguna constructora pueda asumir ahora el coste de la operación. "No es un buen momento, pero el Barça busca la recalificación", dijo Argelet, que mostró su intención de implicar en su lucha a la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB). "No es algo que concierna sólo a Les Corts: es a toda Barcelona. Estos solares son la despensa de espacio libre que le queda a la ciudad", dijo.
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