Delanoë apoya a Aubry para que dirija el PS francés

El alcalde de París, Bertrand Delanoë, el dirigente que decidió el domingo apearse de la lucha por el liderazgo del Partido Socialista francés (PS) en el congreso celebrado este fin de semana en Reims, hizo público ayer a cuál de las tres corrientes que restan dará su apoyo. Delanoë ha pedido a los militantes, que tienen que elegir el jueves por votación directa al nuevo líder, que se inclinen por la alcaldesa de Lille, Martine Aubry.

En una carta abierta, Delanoë advierte: "Nuestra responsabilidad es inmensa". Y luego añade: "El jueves está en juego la identidad misma del PS. Y en nombre de mis convicciones políticas he decidido apoyar la candidatura de Aubry".

En las votaciones previas al congreso, la candidatura de Ségolène Royal obtuvo el 29% de los votos de los militantes; Delanoë se hizo con el 25%; Aubry con el mismo porcentaje, y Benoît Hamon, el tercer candidato en discordia, con el 18%.

Si el jueves por la noche no se alcanza la mayoría absoluta, la votación se repetirá el viernes. De esta forma, es probable que hasta la madrugada del sábado no se conozca el nombre del futuro primer secretario del PS, cabeza visible de la izquierda en Francia.

El hecho de que el congreso se cerrara en falso, sin elegir un líder y con el PS dividido en tres corrientes enfrentadas después de tres días de discusiones e intervenciones públicas, ha desencadenado un alud de críticas en la sociedad francesa. El diario Le Monde titula en su edición de hoy: "El PS deja a los militantes desamparados". Por su parte, el conservador Le Figaro resumía el congreso de Reims en una palabra: "Fiasco". El periódico de izquierda Libération, en un editorial, proclamaba: "[El presidente de la República] Nicolas Sarkozy sabe que tiene enfrente a un Partido Socialista ingobernable, sin idea política clara, sin estrategia y sin líder incontestable".