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Reportaje:

El asombroso cambio de un político

Ximo Tur gobierna en Calp con el PP, al que fustigó

El 10 de octubre de 2006, el pleno de Calp acabó como el rosario de la aurora. Varios periodistas y concejales tuvieron que mediar para evitar que el entonces concejal popular Juan Roselló, imputado judicialmente por el caso Aguas de Calpe, agrediera en la calle al portavoz del BNV, Ximo Tur. Pese al altercado, Tur aseguró que seguiría denunciando a Roselló por "haber contratado a una empresa de buzoneo sin personal y sin capital social para hacer las obras de la red transversal del agua". Esa empresa estaba representada por el cuñado del propio edil del PP. Los populares gobernaban entonces con mayoría absoluta y el BNV estaba en la oposición.

Ahora, apenas dos años después, Tur, después de romper el pacto alcanzado con el PSPV tras las últimas elecciones, es el alcalde gracias al apoyo del PP. Y su discurso ha cambiado de forma asombrosa: en el último pleno instó al portavoz socialista, Luis Serna, a que respetara la presunción de inocencia y la honorabilidad de Roselló, que aún sigue imputado por el juez. Además, ha devuelto al Grupo Popular el control de Aguas de Calpe.

Las hemerotecas demuestran la metamorfosis del alcalde de Calp
Tur acusó al PP de "monstruosidades urbanísticas" y de "chanchullos"
Todo está olvidado tras un "pacto sin condiciones" de Tur con los populares

Hay muchas más pruebas de la metamorfosis que ha experimentado el actual alcalde de Calp. Las hemerotecas, convertidas en su principal enemigo, muestran que en la pasada legislatura y en buena parte de esta, mientras mantuvo buenas relaciones con los socialistas, Tur acusó al PP de haber realizado "monstruosidades urbanísticas", de "no conocer la democracia ni la vergüenza", de sobrecostes en las obras municipales y de haber permitido el "chanchullo de Roselló con su cuñado". Todo está ya olvidado después del pacto "sin condiciones" firmado por Tur con los populares.

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Por eso, las declaraciones del edil nacionalista y de su propio partido durante los tiempos de lucha con el PP causan ahora una honda perplejidad. La ejecutiva comarcal del BNV calificó de "actitudes fascistas, totalitarias y de extrema derecha" el intento de agresión de Roselló a su concejal en octubre de 2006. Y el propio secretario nacional, Enric Morera, publicó en su blog al día siguiente que "detrás de la violencia verbal y casi física que representa Roselló está el miedo del PP a perder la mayoría absoluta en Calp". "Es la señal de que nuestra gente lo está haciendo muy bien. Ximo, iré a tu toma de posesión como nuevo alcalde, no tengas ninguna duda", añadía. Morera no podía imaginar lo paradójicas que eran sus predicciones. Efectivamente, Ximo Tur fue investido alcalde, pero con los votos de los populares, a los que antes había soñado derrocar. Morera no fue a la toma de posesión y aún guarda un extraño silencio sobre la alianza.

Antes de las elecciones de 2007, Tur siguió bregando contra el gobierno popular del entonces alcalde Javier Morató. Denunció junto al PSPV un sobrecoste de dos millones en la ampliación del Ayuntamiento y en marzo de 2007 atacó la gestión urbanística de los populares, a los que acusó de "destruir el paisaje" al autorizar un hotel de 104 metros de altura junto al mar. Ahora ha nombrado edil de Urbanismo al popular José Perles, el mismo que impulsó ese polémico edificio.

Durante la campaña electoral de mayo de 2007, el BNV abogó por un cambio de gobierno en Calp con su ya famoso lema de Adéu PP. Lo logró. La lista popular encabezada por Javier Morató perdió la mayoría absoluta y los nacionalistas pactaron con PSPV y PSD un nuevo tripartito que le dio la alcaldía al socialista Luis Serna. "Calp ha votado por el cambio y eso deben asumirlo los populares", dijo Tur, quien exigió a Javier Morató que "deje de intrigar y asuma su nuevo papel en la oposición". Ahora, en cambio, el alcalde del BNV sonríe cuando Morató dice que forma junto al Bloc "una gran familia".

Hay un documento aún colgado en Internet que no tiene precio, el blog ximotur.com, en el que el edil del BNV opina sobre la gestión del gobierno que desde junio de 2007 compartió con el PSPV. Durante mucho tiempo, Tur se mostró satisfecho. El 4 de agosto afirma: "Joan Morató [concejal socialista] y yo nos hemos ganado hoy el sueldo", y se vanagloria de haber eliminado todos los nombres franquistas de las calles que aún mantenía el PP. Y el 21 de ese mes afirma que, pese a posibles traiciones, el gobierno que mantiene con los socialistas "llegará a viejo diga lo que diga el PP". Ese pronóstico tampoco se cumplió.

Aún el 15 de septiembre de 2007, Tur lanza un furibundo ataque contra Roselló, al que acusa de denigrar en el pleno a uno de los periodistas que "destapó el chanchullo que llevaban entre manos Roselló y su cuñado por ejecutar las obras de la red de aguas". Promete negarle el saludo al edil del PP "mientras se siga burlando del pueblo de Calp".

Algo sucedió entonces. Durante dos meses, Tur no publica en su blog. Lo hace el 20 de noviembre para atacar por sorpresa al socialista Joan Morató, que durante unas negociaciones le habría dicho que "la ley no siempre se puede cumplir". Tur muestra sus dudas de que Joan Morató sea capaz de cumplir el pacto con el BNV. Sólo un día después, se muestra muy pesimista sobre su alianza con los socialistas y lanza un aviso: "El PSOE es el grupo mayoritario de Calp gracias a los votos de BNV y PSD, pero con la misma legitimidad podría ser el PP". Esa predicción sí se cumplió.

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