Una galería de 200 años contribuyó a las inundaciones de Coslada

Una galería subterránea que proporcionaba agua de manantial a la Real Fábrica de Paños de San Fernando de Henares, de unos 200 años de antigüedad, contribuyó a las inundaciones de septiembre en Coslada, que provocaron la muerte de una mujer. Es la conclusión del informe técnico encargado por la Comunidad a la empresa de ingeniería Euroestudios, que también asegura que las inundaciones se habrían producido aunque no se hubieran hecho las obras de la M-45 y la urbanización El Cañaveral, en Madrid.

La causa principal fue la inusitada abundancia de precipitaciones. El consejero de Presidencia, Francisco Granados, recordó ayer en la Asamblea que los días 22 y 23 de septiembre "se activó el nivel 1 de peligro" por la lluvia, que se "concentró en una franja muy pequeña de tiempo". El informe precisa que el primer día se registraron 58,9 litros por metro cuadrado en cinco horas, y en poco más de dos horas se llegó a los 78,6 litros. No ha llovido de esta forma desde hace 36 años.

El informe recuerda que hay cuatro kilómetros cuadrados -un área delimitada bajo la M-45, la calle de Santiago, en Coslada, y la avenida de Vicálvaro- que son vía de desagüe natural. Es en este lugar donde se han producido las inundaciones. Ahí existe una zona de huertas donde fueron construyéndose pequeñas edificaciones para guardar herramientas y, finalmente, se levantaron casas. "Y después los vecinos abrieron pozos", explicó el director general de Protección Ciudadana, José Antonio Pérez Sánchez.

La caída de la lluvia del primer día arrastró agua y lodo, que se filtró hacia la galería subterránea, sin uso desde hace años. Por eso los siguientes días, pese a que las precipitaciones fueron menores, también hubo inundaciones. Lo que ocurrió fue que la galería se taponó e impidió el drenaje del agua, según el informe. En su lugar, explica el director general, sobre el terreno se produjo un efecto esponja y el agua se filtró a los patios al rezumar los pozos en las casas.

También ayudó que El Cañaveral no cuenta con servicio de saneamiento ni existen rejillas para recoger el agua, lo que "provoca importantes deficiencias en el drenaje superficial", asegura el informe.

El propio documento ofrece dos soluciones para evitar futuras inundaciones. Una, a corto plazo, es la construcción de una balsa reguladora en la M-45, de unos 200 metros por 150 y una profundidad de entre cuatro y nueve metros, con capacidad de 42.500 metros cúbicos. Su objetivo sería laminar "las avenidas que llegaran a ella" y también dejar "fuera de servicio la galería de la Real Fábrica de Paños", afirma el informe.

Pero la solución a largo plazo sería construir una red de colectores de 4,4 kilómetros, que permitiera evacuar el agua hasta la depuradora de Casaquemada en el Jarama. La red estaría formada por un colector de dos ramales, uno en el lado izquierdo de la avenida de Vicálvaro y otro por la parte derecha de la calle de Santiago. Ambos se juntarían en la entrada a San Fernando y desde allí discurriría un solo colector paralelo a los del Canal hasta el río.

Pero Granados dejó ayer la pelota en el tejado de los ayuntamientos. "A partir de ahora les corresponde hacerse cargo de las obras a los alcaldes de Coslada y San Fernando", dijo.