Palmeras y gusanos de hielo en el polvo interestelar
Estamos acostumbrados a ver en la Tierra agua helada con muy diversas apariencias, pero lo sorprendente es que en otros cuerpos celestes y en el polvo interestelar debe de existir hielo en forma de gusanos y plantas tan verosímiles que pueden hacer creer, a simple vista, que existe vida extraterrestre. El crecimiento en condiciones extremas de presión a alto vacío y temperaturas de hasta 267 grados bajo cero provoca esa apariencia. Así lo han constatado en experimentos de laboratorio los científicos Julyan Cartwright, Claro Ignacio Sainz Díaz y el doctorando Bruno Escribano, del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (CSIC-Universidad de Granada).
En los últimos años, han investigado sobre el crecimiento del hielo en condiciones extremas y han concluido que se da una mezcla de estructuras cristalinas y amorfas, con formas biomiméticas, como de gusanos o de plantas. Los resultados han sido publicados en la revista The Astrophysical Journal. Su estudio sirve para advertir a aquellos que buscan vida extraterrestre basándose simplemente en la morfología de las imágenes que obtienen en otros planetas y satélites que tienen dichas condiciones atmosféricas. "Si ven algo parecido no tiene por qué tener un origen biológico", explica Sainz Díaz. "Lo hemos demostrado en el laboratorio".
Gran cantidad de hielo en estas condiciones de bajas temperaturas existe en muchos cuerpos como los satélites de Júpiter y Saturno (como Europa y Titán), según los especialistas, aunque se conoce muy poco todavía sobre ello. En condiciones extremas de presión y de temperatura está el hielo que recubre las partículas de polvo del espacio interestelar y en las regiones y condiciones en las que se originan los cometas.
¿Y si en el hielo estuviera el origen de la vida en la Tierra? Los científicos se lo plantean puesto que al congelarse el hielo marino, las sales minerales pueden cristalizar en los canalillos que dejan los cristales y la interconexión entre éstos y la superficie del hielo podría ser un lugar idóneo para que emergiera la vida primitiva, aseguran los investigadores.
Además de estas novedades sobre el hielo en condiciones extremas, en el congreso internacional Euroice 2008, que tuvo lugar el pasado mes en Granada, se presentó la acelerada disminución de la capa de hielo en el polo Norte y se advirtió de la consiguiente liberación de dióxido de carbono y metano, lo que podría tener un gran impacto en el cambio climático.
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