Tura anuncia que la Modelo seguirá abierta hasta 2013

La Modelo seguirá abierta por lo menos hasta que finalice el año 2012, mientras no se construyan las cárceles que han de servir para vaciar una prisión que es la antítesis de su denominación. Así lo anunció ayer en el Parlament la consejera de Justicia, Montserrat Tura, quien explicó que en el centenario penal hay ahora 1.898 presos, aunque su ocupación debería ser de 1.560.

En teoría sólo debería haber en él presos preventivos, pero la saturación que sufren las prisiones catalanes explica que se hayan trasladado también reclusos que cumplen condena. En las cárceles catalanas había 10.068 presos el pasado 30 de octubre y la situación es tan extrema que en la prisión de Tarragona se ha tenido que soldar una cuarta cama a las literas de tres alturas que ya existían para poder recibir más reclusos.

Culpa a una juez de que un hombre estuviese 28 horas detenido por error

CiU reprochó ayer a Tura el retraso de ocho años que sufrirá la clausura de la Modelo y celebró que Justicia rectifique, pues el nuevo centro de preventivos que se construirá en la Zona Franca tendrá una capacidad de 1.220 presos en lugar de los 750 que se dijo hace unos meses.

La consejera respondió también a preguntas muy diversas de los diferentes grupos. Así, restó importancia a las críticas que ha generado entre un amplio sector de jueces la Ciudad de la Justicia y aseguró que existe "algún defecto", que se reduce a considerar si "esta luz debe ir aquí o allá". "Serán 350.000 metros cuadrados, una gran mejora en comparación con el edifico actual de Lluís Companys [donde están los juzgados de instrucción y de lo penal], que no cumple ningún requisito", dijo.

También fue interpelada por el caso del profesor de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona Manuel Sanromà, que fue detenido el pasado mes de abril por un error de los Mossos d'Esquadra. El arresto duró 28 horas, pero el error podría haberse detectado al cabo de unas horas. Según la consejera, si eso no ocurrió así fue por culpa de la juez de guardia de Cornellà Mercedes Arbós Marín, quien telefoneó al juzgado de guardia de Lleida a las 12.45 horas del 20 de abril, domingo, y se le dijo que la orden de detención no estaba vigente, pero aun así la juez prorrogó la detención de Sanromà hasta comprobarlo el lunes a través del juzgado que la dictó.

"A esa juez le hemos de enseñar que tenga más confianza en el sistema informático moderno", dijo Tura, quien también reprochó a la magistrada "que no quiso confiar en la informática judicial de Lleida". El caso le sirvió a la consejera para reclamar "una nueva cultura en la Administración de justicia".