"Prefiero hablar a chatear"

Lucas Masciano (Argentina, 1977) presenta su tercer disco en España. Entre concierto y concierto, contesta al cuestionario tomando un café con leche en Barcelona, ciudad en la que vive desde hace cinco años, porque prefiere hablar que chatear: "No es natural, me pone nervioso. Acabas hablando con 10 ventanas, te confundes y terminas diciendo cosas a uno que querías decir a otro".

Pregunta. ¿Qué opina de la descarga gratuita de música?

Respuesta. Por un lado, es positivo. Es fácil que la gente te escuche. Pero creo que si una persona respeta a un artista, que se baje cosas alguna vez pero que también le apoye. Por ejemplo, que compre un disco. Dependerá de esa inversión que el próximo trabajo sea mejor. Si hay presupuesto, habrá mejores productores, instrumentos, estudios....

P. ¿Qué es lo más curioso que ha encontrado en YouTube?

R. Un vídeo de cuando llegué a Barcelona y tocaba en la calle. Una grabación en Portal de l'Àngel, donde conocí a David (David Otero, de El Canto del Loco), antes de grabar mi primer disco, Al dablo con todo. Y vídeos de gente que hace cosas con mi música. Esto me gusta.

P. ¿Cuántos ordenadores tiene y para qué los usa?

R. El fijo y el portátil. El fijo para componer y grabar maquetas, y el portátil para conectarme a la Red. Como casi no veo la tele, veo series desde la cama por Internet. Y entro en MySpace y FaceBook, aunque las redes sociales tienen trampa: están bien para relacionarse, pero perdemos cada vez más intimidad.

P. ¿Es adicto a la tecnología?

R. Hasta el año pasado viajaba con el portátil, pero ahora no me gusta estar todo el día enganchado a la pantalla, en la furgoneta y en los hoteles, y si lo llevas acabas así, con los ojos cruzados. Y ya no juego a la Play tampoco.

P. ¿Y al móvil?

R. Lamentablemente, sí. Aunque no creo que sea natural, todos con aparatos que emiten ondas todo el día, pegados a nosotros. Cuando estoy de vacaciones y lo apago es una satisfacción.

P. ¿Qué tono lleva en el móvil?

R. Uno que venía en el aparato, una melodía china o japonesa muy fea.

P. ¿Cuál es el último artilugio tecnológico que ha comprado?

R. Un iPod, que casi no uso. No me gusta salir a la calle y aislarme con 5.000 discos. Al final lo uso en casa o de viaje, pero no lo escucho más de 10 minutos.