Libertad para un policía marbellí acusado de agredir a prostitutas

Enrique, uno de los dos policías locales de Marbella detenidos el pasado 29 de septiembre bajo la acusación de agredir a dos mujeres que ejercían la prostitución en un club de alterne de la localidad fue puesto ayer en libertad por orden del juez Ricardo Puyol, que instruye el caso. Otra mujer, limpiadora municipal y que supuestamente traficaba con droga en el local, llamado La Casa Azul, también quedó en libertad con cargos y sin necesidad de prestar fianza. Ambos imputados deberán presentarse en los juzgados los días 1 y 15 de cada mes, según el letrado de la mujer, José María Vázquez.

Sin embargo, el juez Puyol, titular del juzgado de Instrucción número 2 de Marbella, mantiene en prisión provisional al principal acusado del caso, un policía local conocido por su apodo, Machota. Este agente está acusado de delitos de agresión sexual, contra la salud pública, lesiones y omisión del deber de perseguir delitos.

Los agentes Enrique y Machota fueron denunciados a principios de mes por dos prostitutas de la Casa Azul. Ellas y otros dos testigos protegidos aseguraron que Machota, un hombre de gran corpulencia, golpeó a las dos mujeres y violó a una de ellas en un arrebato de cólera al saber que en club no había droga para ofrecerle. En uno de los altercados, ambos agentes echaron a una piscina una máquina de correr y varias pesas.

Otros cuatro agentes de la Policía Local marbellí fueron imputados en la misma operación. Se les acusa de estar al corriente de los supuestos delitos que cometían sus compañeros y no denunciar ninguna irregularidad. Según fuentes policiales, todos ellos entraban y salían del prostíbulo como si fueran "amigos de la casa".

Los dos policías encarcelados fueron suspendidos de empleo y sueldo por decreto de la alcaldesa marbellí, Ángeles Muñoz, del PP.