Medio Ambiente acepta trasvases en un giro de su política del agua
El ministerio proyecta otro Tajo-Segura desde Extremadura
El Ministerio de Medio Ambiente ha dado un giro radical a la política hidráulica del Gobierno desde que José Luis Rodríguez Zapatero llegó a La Moncloa en 2004. El departamento deja ahora de lado la política antitrasvases de la ministra Cristina Narbona en la pasada legislatura y se dispone a emprender un nuevo Tajo-Segura desde Extremadura para sustituir al actual, si bien será presentado como un cambio de la conducción. El giro lo explicó ayer el secretario de Estado del Agua, Josep Puxeu, ante ingenieros y responsables de confederaciones hidrográficas. El nuevo trasvase "es una posible buena solución", en palabras de Puxeu, quien afirmó que "gestionar el agua desde dogmas es un error en el que hemos estado inmersos los últimos años". Incluso puso en entredicho la construcción de desaladoras, presentadas por Narbona como alternativa a los hasta ahora prohibidos trasvases. "Las desaladoras no son la panacea. Sirven en momentos de crisis y en la costa".
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