El PSC y Convergència rechazan el gobierno 'sociovergente' que propugna Duran

Dos no se casan por más que un tercero se empeñe. El Partit dels Socialistes de Catalunya y Convergència Democràtica rechazaron ayer de plano el pacto que propugna el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, para que Cataluña sea gobernada por una coalición de socialistas y nacionalistas, la sociovergencia. El PSC, que mantiene que Duran representa la cara "sensata" de CiU, recordó que su apuesta es el tripartito de izquierdas, mientras que el presidente de CDC, Artur Mas, admitió que en su partido no hay consenso para dar cumplimiento a los deseos de Duran. Ante el poco éxito de las proclamas del líder democristiano, Unió dio otra vuelta de tuerca y pidió, directamente, la convocatoria de elecciones anticipadas.

La dirección del PSC no se sorprende de la demanda de Duran, pero le da escasa credibilidad por el poco peso de Unió Democràtica en el seno de la federación CiU. Eso sí, en un momento en que deben pactarse los Presupuestos generales del Estado en Madrid y leyes importantes como la de Educación en Cataluña los socialistas catalanes no quieren afear a Duran su postura más de lo estrictamente necesario. Por ello, el portavoz del PSC, Miquel Iceta, volvió a agasajar, para desesperación de Artur Mas, al líder de Unió Democràtica. Iceta describió a Duran como el "hombre serio, prudente y responsable" de CiU que está "asustado" por la "deriva radical de Convergència Democràtica". Ello explicaría, según los socialistas, que Duran busque un acercamiento al PSC.

Artur Mas, cuyo núcleo de colaboradores simpatiza mucho más con las ideas de Esquerra Republicana que con los de los socialistas, tuvo que admitir que su partido no tiene prioridades de pacto establecidas, informa Natalia Iglesias. "En CiU hay dirigentes que prefieren -como me consta de Duran- un pacto con los socialistas y otros a los que les gustaría un pacto de raíz más estrictamente nacionalista, concretamente con Esquerra, es decir, que hay dirigentes en un sentido y en otro", dijo.

La respuesta de Unió a tan escaso poder de convocatoria fue subir un grado sus reivindicaciones. El secretario general del partido, Josep Maria Pelegrí, abogó por celebrar elecciones anticipadas. El motivo es que a ojos de Unió Cataluña "se está degradando".

Los actuales socios del PSC reaccionaron con una mezcla de incredulidad y nerviosismo. Esquerra Republicana evitó valorar el posicionamiento de Unió. Desde Iniciativa, Jaume Bosch, dijo que en los planes de futuro de los ecosocialistas sólo hay lugar para "pactos de izquierda".