La comedia del pop
El mundo del rock inspira a los nuevos humoristas
El último show de Lenny Bruce tuvo lugar en San Francisco y en él compartía cartel con Frank Zappa. Elvis era fan de la imitación que de él que hacía Andy Kaufman, y en su habitación, tras su muerte, se halló una completísima colección de vídeos del tipo al que R.E.M. dedicaron su tema Man on the moon. Monty Python posee una de las discografías más sólidas de la historia del pop. Steve Coogan fue, durante un par de semanas, el supuesto padre del supuesto hijo de Courtney Love, líder de la banda Hole y ex novia del grunge. El pop y la comedia se han tocado en infinidad de ocasiones, desde los años sesenta hasta nuestros días. El humorista Lenny Bruce fue más estrella del rock que muchos de los músicos de la época, mientras que Noel Gallagher, probablemente, sea el mejor cómico inglés de la última década.
Durante el último par de años, una nueva estirpe de humoristas, criados en el mundo del pop, ha redefinido esta relación. Russell Brand, rey del chiste pop y actor, representa a la perfección esta nueva camada de cómicos que visten como estrellas del rock, que toman como referentes estilísticos y vocacionales a músicos y que flirtean constantemente con la industria del disco. "Lo que siempre he querido ser es alguien como Morrissey", comentaba este inglés ex novio de Kate Moss. "Pero no tengo demasiado talento musical. Me conformo con contar chistes en los mismos lugares en los que antes han actuado mis bandas preferidas". Este mes, Brand se embarca en un tour diseñado a imagen y semejanza de las giras de las bandas de rock. Algo parecido sucede con The Mighty Boosh, un colectivo humorístico y musical, liderado por Noel Fielding y Julian Barratt. Habituales en televisión y radio británicas, estos "descerebrados" organizaron este verano su primer festival de rock y humor. Actuaron presentando sus propias canciones, además de artistas consolidados, como Gary Numan. "Hemos mutado de referentes. Ahora queremos ser como Muse. Una banda de rock loca y excesiva", comentaba Fielding.
No es extraño que en la mayoría de festivales musicales en el Reino Unido haya una carpa en la que actúan humoristas y cada vez es menos extraño que estos humoristas se cuelen en las listas de éxitos pop. El método puede ser el clásico: la canción con letra supuestamente divertida que es sintonía y coletilla, como en el caso de la banda sonora de la celebrada Little Britain, la serie sobre estereotipos británicos creada por Matt Lucas y David Williams; o el más novedoso y más cercano al capricho o a la filiación que a la profesionalidad, como es caso de Russell Brand cantando sin ninguna ironía When I'm Sixty tour de The Beatles en el álbum que celebraba los 40 años de Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band.
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