Noctámbulos de Singapur

La mayor preocupación de cualquier técnico es que sus deportistas se acuesten a la hora correcta. Pero en el Gran Premio de Singapur se produce una gran contradicción. La disputa de la primera carrera nocturna de la historia de la fórmula 1 el próximo domingo, ha creado una situación inverosímil. Los fisioterapeutas y los médicos de los equipos aconsejan a sus pilotos y mecánicos que no se vayan a dormir antes de las cuatro de la madrugada. Parece una locura. Pero están convencidos de que sólo de esta forma podrán llegar a la hora de la cronometrada (22.00 horas, 16.00 en España) y de la carrera (20.00, 14.00 de la en España) en las mejores condiciones físicas y psicológicas.

"El problema es que no hay muchas cosas que hacer a partir de las 11 de la noche", explicó ayer Fernando Alonso. "Llegué el miércoles por la tarde a Singapur y al circuito alrededor de las siete". El asturiano dio una vuelta andando junto a algunos miembros del equipo para estudiar cada curva, comprobar la luminosidad y ver los puntos más conflictivos. Después dio varias vueltas más en bicicleta. "Mis primeras sensaciones fueron muy buenas. Creo que han hecho un gran trabajo en la pista y en las instalaciones. Me pareció que la chicane y algún piano son muy altos y que pueden estropear la parte baja del coche si te los saltas. Lo que no vi fue ningún punto en que se pueda adelantar", señaló Alonso.

Alonso se levanta sobre la una de la tarde, desayuna a las dos y come a las siete

Sin embargo, aún preocupándole, su principal problema el miércoles y ayer fue cómo invertir el tiempo que le quedaba hasta las cuatro de la madrugada. En su primera noche se mantuvo despierto viendo en televisión los partidos de fútbol del Barça y del Madrid. Ayer concluyó su conferencia de prensa alrededor de las ocho, volvió a dar unas vueltas al circuito para intentar memorizarlo, jugó a las cartas con Kubica y llegó a su hotel sobre las 12 de la noche. Cenó muy tarde. "Y luego vi algunas películas en mi habitación. He traído un montón para no aburrirme", indicó. La hora prevista para levantarse es alrededor de la una de tarde, el desayuno a las dos y la comida a las siete.

Tanto Lewis Hamilton como Heikki Kovalainen, los dos pilotos de McLaren, confesaron que habían estado jugando al tenis, haciendo ejercicio, y matando el tiempo con videojuegos. "Miro mi reloj y voy ajustando mis actividades a la hora que es. A partir de hoy nuestra única preocupación será la carrera", dijo Kovalainen. "Tras la cena", agregó Hamilton, "busco cosas para estar ocupado, veo películas o juego al tenis".

Otros encuentran soluciones más familiares. "Mi compañera Karen está aquí y tratamos de utilizar este tiempo extra", confiesa el escocés David Coulthard. "Ayer llegué al circuito a las 12 de la noche, di algunas vueltas y luego paseé por la ciudad. A las tres de la madrugada no había ningún restaurante abierto. Así que no me quedó otro remedio que usar el servicio de habitaciones. Pero no me gustaría estar todo el fin de semana con el mismo plan".

A partir de hoy las cosas van a cambiar. Los entrenamientos libres permitirán a los pilotos tomar contacto con la pista por primera vez con sus monoplazas. "Todo será muy distinto", indicó Alonso, que se quejó de la poca ayuda que había recibido por parte de su equipo para familiarizarse con el trazado. "El equipo me envió un mapa del circuito con las marchas que ellos creen que vamos a utilizar en las curvas. También me mandaron unos enlaces de Youtube para ver algunos vídeos", dijo Alonso. "La preparación de la carrera ha sido un poco escasa. Sólo hemos bajado un 50% la intensidad de las luces del volante y debo comprobar si utilizo una visera blanca y transparente u otra ahumada para evitar reflejos". Otros pilotos han dispuesto de un simulador.