Un homenaje reivindica la labor cultural de Cirici Pellicer
Algunas de las expresiones que más fortuna han hecho entre la sociedad catalana, como la Catalunya bressol, fueron ideadas por el crítico de arte, senador y activista cultural Alexandre Cirici Pellicer, del que este año se cumple el 25º aniversario de su fallecimiento. Con la excusa de esa efeméride y con el objetivo de reivindicar su legado, La Pedrera acogió ayer un homenaje al intelectual que repensó a Gaudí y todo el modernismo, el mismo que a través de sus influyentes artículos en Serra d'Or encumbró a lo mejor de la cantera local de artistas.
Tras un repaso a su vida y carrera a cargo de Narcís Selles, autor del libro Alexandre Cirici Pellicer. Una biografia intel·lectual (Afers), el acto se bifurcó para analizar, por un lado, su dimensión política y social y, por otro, sus logros como diseñador, crítico y pedagogo. Entre los ponentes se encontraba el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol, quien recordó el impacto que le creó uno de los textos del homenajeado dedicado a Francesc Pujols, D'Ors y Pijoan, a los que ponía como ejemplo de ambición para Cataluña. El eurodiputado Raimon Obiols, además de rescatar algunos de aquellos eslóganes célebres, subrayó su contribución al socialismo catalán mediante la creación de símbolos y discursos que aún se sostienen hoy.
Si bien varias voces resaltaron la renovación que supuso Cirici en el ámbito de la crítica artística española, el editor Josep Maria Castellet consideró que sería empobrecedor ceñir su contribución a unas fronteras, porque, a su juicio, Cirici fue sobre todo "un gran intelectual europeo". No obstante, la memoria es débil y sólo así se explica que en algunas misceláneas recientes no se incluya alguno de sus artículos, tal como lamentó la crítica de arte Pilar Parcerisas.
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