Detenidos otros cuatro narcos del clan de 'El Mulo'

La policía ha detenido en las últimas horas a cuatro personas de la Ría de Arousa por su presunta relación con la organización de narcotráfico que dirigía desde Cambados Rafael Bugallo Piñeiro, apodado El Mulo, en prisión desde el jueves de la pasada semana. Estas nuevas detenciones, que se suman a otras ocho, están relacionadas con un alijo de 3.500 kilogramos de cocaína que fueron recuperados del mar y que intentó desembarcar la lanzadera que sus tres tripulantes abandonaron en la playa de A Lanzada, después de prenderle fuego en la madrugada del pasado 15 de agosto.

Por el momento no ha trascendido la identidad de los detenidos y al cierre de esta edición estaba previsto que pasaran a disposición judicial. Tanto fuentes policiales como judiciales consultadas, mantienen un absoluto mutismo sobre esta segunda fase de la operación que todavía está abierta, por lo que no se descarta que, en las próximas horas, pudieran producirse más arrestos relacionados con el caso.

La captura de El Mulo se produjo dos semanas después de que una investigación policial cruzada entre la policía y el servicio de vigilancia aduanera permitiera interceptar el desembarco del cargamento, que alcanzaría en su totalidad las cuatro toneladas, el mayor desde 2004.

Fardos flotando

La persecución obligó a la enorme lanzadera de 15 metros de eslora y 6 motores de 220 cv cada uno a deshacerse de la droga cuando navegaba a gran velocidad desde Cabo Silleiro, donde fue avistada por un helicóptero de aduanas. La mayor parte de los fardos aparecieron flotando en las Rías de Pontevedra y Arousa, mientras otros llegaron a varias playas del litoral arrastrados por la marea.

Bugallo Piñeiro, considerado el responsable de una de las organizaciones que más cocaína introducía en Galicia, era además un experimentado piloto de planeadoras. En libertad condicional desde 2005 tras haber sido implicado en otro desembarco, la policía le seguúa la pista desde entonces.

El Mulo ha caído con el grueso de su equipo, del que también formaban parte sus dos hijos y su novia colombiana. Entre los objetivos de esta operación se encuentra la localización de los tres tripulantes de la lanzadera y otras personas buscadas por la policía y que en la madrugada del desembarco escaparon de sus domicilios.