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Reportaje:PEKÍN 2008 | Atletismo

Mordiscos fenomenales

En menos de tres meses, Bolt ha rebajado el récord mundial en media décima de segundo a pesar de frenarse

Carlos Arribas

Dicen las teorías que, cuando más se acerca la evolución de cualquier elemento, la especie humana, el diseño de una bicicleta, un récord de atletismo, hacia sus límites, más pequeños serán los pasos que dé, más tiempo será necesario para un cambio cada vez más pequeño. Pero a esta verdad histórica se opone el carácter de fenómeno de Usain Bolt, quien en sólo dos meses y medio, en dos carreras corridas como quien no quiere la cosa en su primera temporada dedicada a los 100 metros, le ha pegado un mordisco de media décima de segundo —de los 9,74s en que lo había dejado Asafa Powell en septiembre pasado a los 9,69s en que lo dejó él ayer pasando por los 9,72s del 31 de mayo— al récord mundial de los 100 metros. El último escalón de tal magnitud le costó a Powell, su compatriota y antecesor, dos años y tres meses, desde los 9,77s en que dejó el anterior récord (9,79s de Greene) en junio de 2005 a los 9,74s de septiembre de 2007. Después de caer peldaño a peldaño, el récord ha empezado a rodar escalera abajo: su destino aún no se vislumbra.

El último escalón de tal magnitud le costó a Powell dos años
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¿En dónde lo dejará Bolt, que aún tiene 21 años y sigue evolucionando, ganando cuerpo, la musculatura necesaria para equilibrar por arriba la velocidad eléctrica de sus pies? ¿En 9,60s? ¿Más abajo aún?

Es como si el fabuloso jamaicano, el rayo, que dicen los de habla inglesa jugando con su apellido (lightning-bolt significa rayo), apodo que él refuerza haciendo con los brazos la doble z con que los de los cómics representan el aparato eléctrico de las tormentas, se hubiera empeñado en llevar la contraria a la ciencia en todos los terrenos. A la de la evolución, igual que a la de la mecánica, que busca ajustar sus conocimientos a la nueva realidad que representa el jamaicano. "En la final misma, sólo con que hubiera echado el pecho hacia adelante al llegar a la línea habría ganado tres centésimas", apunta Ramón Cid, técnico de velocidad de la federación española. En la foto finish, que fija el tiempo exacto de Bolt en 9,682 milésimas (por lo que se redondea a la centésima superior, 9,69, de gran esplendor erótico) se aprecia, en efecto, cómo mientras el resto de los atletas adelantan el pecho casi hasta la altura de la rodilla más avanzada, Bolt lo lleva mucho más atrás, tres centésimas más atrás. "Y si a eso le añadimos que prácticamente hizo los últimos 30 metros sin el balanceo de los brazos, ahí tenemos otras tres centésimas más". Y, ya entregado a la causa, Cid, que cree que ayer el atletismo vivió una de sus noches más históricas, continúa con sus cálculos mentales: "Teniendo en cuenta que en la final el viento fue nulo, si metemos dos metros por segundo de viento a favor [el máximo legal] y nos vamos a una altura de 600-700 metros, estoy seguro de que bajará de los 9,60s, una marca que hace nada parecía utópica". Hace poco más de un mes, en los trials estadounidenses, Gay corrió en 9,68s, los 100 metros más rápidos de la historia, aunque con un vendaval a favor de 4,1 metros por segundo.

Mientras tanto, los especialistas en física de palancas aún siguen buscando el secreto del secreto de Bolt: cómo es capaz de mover su zancada de persona de 1,96 metros, el esprinter más alto que nunca ha sido plusmarquista mundial, a la velocidad de los esprinters de bolsillo, los representantes de otras épocas. Bolt, resumen, es como Lewis moviendo las piernas a la velocidad de Ben Johnson, fascinante. Y, como Lewis en Los Ángeles, también dejó al segundo, a Thompson, a exactamente dos décimas, a poco más de dos metros, y, como Lewis en Seúl, también batió el récord del mundo en una final olímpica. Como Lewis y como los más grandes, como Donovan Bailey, Jim Hines o Bob Hayes.

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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