El primer aviso en seis años

Francia se ha dado de bruces con la primera caída trimestral del producto interior bruto en seis años. El decrecimiento del 0,3% sitúa a la segunda economía de la eurozona al borde de la recesión, a pesar de que la ministra de Economía, Christine Lagarde, se esforzara ayer en subrayar que es "totalmente inexacto" utilizar esta palabra para describir la situación.

Lagarde reconoció que esperaba este "mal dato", que se explica, en su opinión, por el impacto de la crisis financiera, el encarecimiento de las materias primas, el reforzamiento del euro y "una inflación que ha alcanzado su techo en junio y julio". No fue el único jarro de agua fría del día, ya que el Instituto Nacional de Estadística también revisó ayer a la baja el crecimiento francés del primer trimestre. Queda en el 0,4%, en lugar del 0,5% que se había anunciado anteriormente.

La ministra reconoció que Francia, que tiene una tasa de desempleo del 7,2%, creará menos empleo en 2008 que el año anterior.