'Bacanal' de fiestas mayores

Este largo fin de semana, media Cataluña está de vacaciones. A la otra mitad le queda el consuelo de poder acudir al sinfín de fiestas mayores que durante estos días animan decenas de pueblos y localidades. En parte, porque coincide con dos festividades religiosas muy populares, la de la Asunción y la de Sant Roc. A este último santo están consagradas las del barrio Gòtic barcelonés que se celebran en la plaza Nova desde 1589, una tradición que con sus 419 años de historia se ha convertido en la fiesta popular callejera más antigua de Barcelona.

El barrio barcelonés de Gràcia, Cardedeu, Platja d'Aro, Gelida, La Bisbal d'Empordà, Roses, Santa Pau, Torroella de Montgrí, Mollet del Vallès, Les Cases d'Alcanar, Cubelles, La Palma de Cervelló, Santa Coloma de Queralt... La lista de enclaves con su fiesta mayor en marcha durante este fin de semana -casi todos los festejos se inician hoy- sería interminable de reproducir. En su mayoría tienen un marcado gusto vecinal y programan actividades dirigidas a un público familiar (partidas de petanca, proyecciones de películas al aire libre, bailoteos con fanfarrias de orquesta, botifarrades...). La programación se suele completar con tradiciones de cultura popular a base de gigantes, sardanas o diables con sus fuegos pirotécnicos.

El cartel musical de estas celebraciones origina ya un buen número de festivales

En Amer hasta aprovechan la ocasión para elegir al hereu y a la pubilla del año (las fotografías de los candidatos se pueden ojear en la web www.amer.cat). Y los que crean que el arte urbano es exclusivo de las ciudades cosmopolitas, se llevarán una sorpresa al ver que este pueblo organizará un festival de graffiti el 6 de septiembre. Pues sí, en el campo también hay afición por el street art.

Dentro de la programación musical, la cosa va a la baja en términos de estrellato. Los más veteranos recuerdan que antaño, en fiestas mayores modestas como las de algunos barrios barceloneses, se dejaba caer de vez en cuando algún artista que sonaba en las radiofórmulas. La subida del caché impide ahora aquellas alegrías. Las comisiones vecinales no pueden competir con los festivales veraniegos, que se han comido todo el mercado.

Por eso, Mercè aparte, para encontrar un cartel de más peso es necesario dejarse caer a partir de mañana por fiestas mayores de ciudades como Badalona, donde este año actúan grupos como Els Pets y Zulú 9.30. La movida festivalera es tan imparable que en ocasiones se aprovechan las fiestas populares para montar un macroencuentro musical como reclamo añadido. Es el caso de L'Arboç Sona, que se celebrará entre el 22 y el 24 de agosto en el pueblo que le da nombre. El festival forma parte de la fiesta mayor y logra reunir en cada edición entre 10.000 y 12.000 asistentes por la llegada masiva de barceloneses. Según los organizadores del festival, el público local y de la comarca se reduce a unas 3.000 personas. Incluso ha desembarcado allí por estas fechas algún autocar con visitantes del País Vasco para disfrutar de la música de L'Arboç Sona, que cumple en esta entrega su quinto aniversario.

En sus escenarios actuarán, entre otros, Antònia Font, Krakovia, Siniestro Total y Elèctrica Dharma. "El festival nació para conseguir que viniera más gente a ver una típica fiesta mayor catalana alejada de los tópicos de la costa", explica Marco Rodríguez, coordinador de la cita. "Formar el cartel es difícil. Pero nosotros hacemos una gran apuesta por los grupos y cerramos el programa con medio año de antelación. Por eso algunas bandas nos rebajan el caché. El bolo de Antònia Font, por ejemplo, será el más barato de su gira", concluye Rodríguez.

Gracias a reinventos como éste, englobar parte de la oferta de la fiesta mayor en una etiqueta -la de festival- que tiene prestigio, los parroquianos de L'Arboç no necesitan desplazarse al Summercase o al Primavera Sound para dar botes a ritmo de buen rock.