El PSOE concede al PP la minoría de bloqueo en el gobierno de los jueces

Al PSOE se le puede volver en contra la reforma del Consejo General del Poder Judicial que promovió en la anterior legislatura para evitar que la mayoría conservadora, que aún se mantiene en el órgano, arrasara a la hora, por ejemplo, de designar a los presidentes de Sala o magistrados del Tribunal Supremo, así como a los presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia de las comunidades autónomas. El cambio exigía para este tipo de decisiones mayoría de tres quintos de los vocales. Es decir, nueve miembros, de los 21 que forman el Consejo, podían vetar un nombramiento.

Gran parte del programa socialista se quedó fuera del pacto de la justicia

Cuando en septiembre se produzca la renovación del Consejo, aplazada desde hace 20 meses, será el PP el que se beneficie del cambio legal que combatió entonces por todos los medios.

En la renovación pactada el miércoles en La Moncloa entre José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy se acordó que el PP pueda proponer nueve vocales de los 20 del Consejo, la cifra necesaria para bloquear las decisiones trascendentes en el órgano de gobierno de la Justicia. El PSOE propondrá a otros nueve y CiU y PNV, un vocal cada uno, según el pacto ya cerrado. Sólo es seguro que la ex diputada Margarita Uría será propuesta por los nacionalistas vascos.

En su primera reunión, los vocales elegirán a un presidente que será propuesto por la llamada mayoría progresista por lo que, finalmente, tendrá un miembro más que los conservadores.

De lo único que no han hablado es de nombres, aunque sí de las condiciones para su selección: que nadie tenga capacidad de veto de las propuestas del otro partido y, en lo posible, que se busque la paridad de género.

El reparto de puestos pactado por el PSOE y el PP permitirá a los conservadores bloquear decisiones trascendentes, como los nombramientos. Es decir, los conservadores se beneficiarán ahora de la reforma legal que promovió el PSOE y a la que ellos se opusieron.

La negociación del pacto de la justicia que cerraron Rodríguez Zapatero y Rajoy ha dejado fuera algunas de las propuestas que el PSOE incluyó en su programa electoral. Por ejemplo, los socialistas no plantearon en ningún momento la descentralización del Consejo General del Poder Judicial en consejos autonómicos, ni la regulación del Consejo en funciones, para evitar que se demore su renovación, como ha ocurrido ahora.

Ambas propuestas eran rechazadas de antemano por el PP. La de los consejos autonómicos está prevista en el Estatuto de Cataluña, pero el PP la tiene recurrida en el Tribunal Constitucional.

Sí se planteó la descentralización del Tribunal Supremo en favor de los tribunales superiores, dejando al primero sólo para la unificación de doctrina. Fuentes de ambos partidos admiten que hubo un principio de acuerdo para que el Supremo mantuviera la competencia en los recursos de casación, pero finalmente se rompió el pacto, arrastrando todo el bloque del modelo judicial, que quedó fuera del consenso. El PP atribuye ese cambio de actitud de última hora a la presión del PSC, versión que niega el Gobierno.

En ese bloque se incluían otros asuntos pactados, como la unidad de los cuerpos de funcionarios de Justicia, el refuerzo del juez profesional, el mantenimiento del sistema de oposición para acceder a la carrera judicial, la regulación de las funciones procesales del secretario judicial y la modernización de los equipos para la ejecución de sentencias, entre otras.

El portavoz socialista, José Antonio Alonso, planteó inicialmente en una de las reuniones con la portavoz popular, Soraya Sáenz de Santamaría, la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal para que los fiscales asuman la instrucción que ahora tienen asignada en exclusiva los jueces. Esa reforma está incluida en el programa socialista, pero fue rechazada de plano por el PP desde el inicio de las negociaciones.

Fuentes socialistas aseguran que mantendrán todas estas propuestas sobre el modelo judicial durante la legislatura. Intentarán buscar de nuevo el consenso con el PP pero, en todo caso, intentarán sacarlas adelante con apoyo de otros grupos.