Fiestas de Barxeta a prueba de seísmos
La localidad, epicentro de un temblor de 3,5 grados que se sintió en Xàtiva
Tocaba descanso en Barxeta, pero no lo hubo. A las 4.30 de la madrugada de ayer, la gente estaba en la calle asustada. La localidad valenciana, que celebra esta semana sus fiestas, fue, en la madrugada del lunes, el epicentro de un temblor de tierra de 3,5 grados en la escala de Richter. Lo sintieron los 1.600 vecinos de Barxeta que salieron de madrugada a la calle. Lo mismo ocurrió en localidades vecinas como Xàtiva, según Protección Civil.
"Estamos acostumbrados a los temblores, pero tan seguidos no habían sucedido nunca" comentaba Vicent Giner, alcalde de Barxeta, donde hace poco más de un mes se registraba un temblor de 3,4 grados de intensidad. "La gente está preocupada" comentaba Vicenta Fernández, vecina de la localidad. "Vivo en un segundo piso y el edificio se tambaleaba". Todos coincidían en que el temblor fue más fuerte que el anterior, hace un mes, aunque dada su corta duración -apenas unos segundos- no hubo daños materiales ni personales.
"Estamos acostumbrados a los temblores, pero no tan seguido"
Según el Instituto Geográfico Nacional, Valencia es una zona de actividad sísmica moderada, en donde los temblores periódicos de baja intensidad "son normales" El mayor terremoto registrado en la zona se remonta al año 1396 con una intensidad aproximada de 6,5 grados en la escala de Richter, según los registros de esta institución.
En España los temblores se producen por los choques de la placa Euroasiática y Africana siendo Andalucía, especialmente la cordillera Bética, el lugar con más actividad sísmica. Valencia, los Pirineos y Lugo son también propensos a sufrir estos fenómenos geológicos.
Ayer, en Barxeta y Xàtiva, en los corrillos matutinos no se hablaba de otra cosa. Algunos vecinos afirmaban que los cuadros se habían caído de la pared. A otros les despertó el ladrido de los perros. Para algunos, los edificios se movían. Diana Cuestas, regente de un bar, explicaba que las botellas habían corrido "un poco" de sitio durante la noche.
El susto fue considerable, sin embargo, los habitantes de Barxeta volvían ayer a sus fiestas. "Para los veraneantes fue una anécdota más" comenta el edil de la localidad, que no considera que el incidente repercuta entre los residentes.
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