Unión Fenosa vuelve a empujar

Fue la noticia del jueves, pero sus ecos todavía resonaban ayer en los parqués españoles. ACS había puesto en venta su participación en Unión Fenosa. Suficiente para que la hasta entonces deprimida Bolsa española subiera como un tiro, por encima de sus homólogas europeas y americanas durante dos jornadas consecutivas.

Y eso que ayer la jornada había arrancado en sentido contrario al anterior, con caídas. Hasta casi media sesión no llegó el optimismo. Pero cuando lo hizo, irrumpió con fuerza. Tanta, que al final el Ibex 35 acabó con unas ganancias del 2,17% y quedó en 11.895,30 puntos. El resto de índices españoles, menos Bilbao, también cerró la sesión en positivo.

Si bien, la sesión de ayer también tiene otra lectura. El pesimismo ha dado paso, al menos de momento, al optimismo, pero la volatilidad permanece.

Por segundo día consecutivo, Unión Fenosa lideró las subidas en el índice selectivo español. Subió un 8,38%. En apenas tres sesiones, ha vuelto a los niveles de comienzos de año. Pierde un 4,2% desde el 1 de enero, cuando el viernes anterior acumulaba una caída anual del 28,34%. Tras la eléctrica, Telecinco y Mapfre. Del otro lado, las mayores pérdidas fueron las de Grifols (-2,79%) y Técnicas Reunidas (-2,76%). Dos valores refugio este año, que han dejado de serlo en una buena semana.

También la banca ha puesto de su parte en el cambio de ánimo, especialmente la estadounidense. La temporada de presentación de resultados al otro lado del Atlántico ha traído mejores noticias de lo esperado. Ayer fue el turno de Citigroup, que, pese a sus pérdidas de 2.500 millones de dólares (1.577 millones de euros), sorprendió gratamente al mercado, y le hizo olvidar los malos datos presentados al cierre del día anterior por Merrill Lynch y que llevaron a Wall Street a abrir la sesión con pérdidas.

En cambio, el petróleo continuó dando ánimos a los inversores. Tanto el brent como el texas cotizaban ayer en torno a 130 dólares el barril.

La negociación, por su parte, en un día en que vencían los contratos de futuros, se disparó hasta los 8.570 millones de euros, mientras que en el continuo quedó en los 3.577.