"¿Cómo no vamos a poder dialogar con los nacionalistas?"

Mariano Rajoy aprovechó el discurso de presentación de su candidatura para desmontar algunas de las críticas lanzadas contra él en los dos últimos meses y para defender los cambios que considera imprescindibles para poder ganar las próximas elecciones generales.

- Unidad y confianza en la victoria. "He aceptado presentar mi candidatura por dos razones fundamentales. Creo sinceramente que estoy en condiciones de garantizar que este partido permanecerá unido. La segunda razón es que tengo la firme convicción de conducir este partido a ganar las elecciones y gobernar en España. Era tan verosímil que podíamos ganar [el pasado marzo] que muchos electores nacionalistas o de extrema izquierda cambiaron sus votos para apoyar al PSOE".

- Los mismos principios. "Contra todo lo que nos hemos cansado de oír durante el último mes, yo no defiendo que cambiemos de posición. ¿De dónde sacan algunos que vayamos a cambiar de principios? Eso sería tanto como cambiar de partido, de militantes y de electores. Eso no es posible. No creo que este partido deba modificar una coma de sus principios. ¿Qué es lo que yo defiendo? Que España no es una nación de naciones ni una suma de territorios, sino una nación de ciudadanos libres e iguales. (...) Creo que no es posible defender la libertad del individuo y la igualdad de oportunidades desde el egoísmo, desde la indiferencia ante el infortunio".

- Los cambios. "Tenemos que cambiar, no de ideas, pero sí de procedimientos para ser más atractivos y más convincentes. Ni somos monotemáticos no podemos permitirlo parecerlo. (...) Pretendemos gobernar para todos y hemos de hablar con todos, salvo los que utilizan la violencia. (...) Debemos dialogar con el Gobierno, por supuesto. E incluso apoyarlo en lo que merezca apoyo".

- Diálogo con nacionalistas. "¿Cómo no vamos a poder dialogar con los nacionalistas para propiciar el bienestar del conjunto de la sociedad española? ¿Acaso vamos a renunciar a acuerdos con ellos para combatir la crisis económica?".

- No inspirar miedo. "Necesitamos ensanchar nuestro caudal de votos. Basta con erradicar los prejuicios que sobre nosotros han cultivado con tanto esfuerzo nuestros adversarios. No quiero que nadie vote al PSOE para que no gane el PP. No quiero que se diga que somos ajenos al sentir de algunas partes de España".

- Un partido de centro. "Eso quiere decir que nosotros no arrastramos doctrinas ni orejeras. Que no tenemos ideas preconcebidas sobre las cosas. Que huimos de cualquier radicalismo. Y que entendemos la acción política desde la moderación, el diálogo y la convivencia. (...) El centrismo no es una doctrina política, es la voluntad de evitar cualquier exageración. La voluntad de sintonizar con los deseos y necesidades reales del pueblo español. (...) No estamos al servicio de una clase social ni de un nacionalismo excluyente".

- Veteranía y relevo generacional. "Queremos un partido abierto, no un club exclusivo. Un partido, sobre todo en donde, en el marco de nuestros principios, sepamos acertar en cada momento con lo que más conviene a los españoles. [En la nueva dirección] se ha procurado equilibrar la veteranía y el recambio generacional. Quiero que estén en contacto permanente con los ciudadanos y que no le quiten el ojo al Gobierno. Que ofrezcan alternativas sólidas. Que hagan ver a todos los españoles que cuentan con un partido preparado para gobernar en cuanto las circunstancias lo dispongan".

- Agradecimientos al equipo anterior y al PP vasco. "No puedo pormenorizar los méritos de tanta gente, pero me vais a permitir dos excepciones. Una es Ángel Acebes, que ha sido nuestro secretario general, al que quiero agradecer en mi nombre y en el vuestro, su lealtad, su esfuerzo, sus aportaciones y su generosidad. La otra excepción se refiere a un grupo de militantes a los que todos llevamos permanentemente en el corazón (...), los del País Vasco. Estamos orgullosos de ser vuestros compañeros. No cambiéis. Os necesitamos así. Porque no sois vosotros los que precisáis de nuestra ayuda. Somos nosotros, somos los demás, los que precisamos ese ejemplo de calidad humana, de convicción democrática y de entrega a la libertad que nos dais todos los días.

- Confianza en el futuro. "Me siento capaz, con fuerzas, con ilusión para ganar las próximas elecciones. Esta vez le hemos quitado cerca de un millón de votantes al partido socialista. La próxima vez vamos a quitarle muchos más".